El ‘show’ debe continuar

Hay fiestas que duran una noche y otras que se alargan en el tiempo. Algunas, demasiado. La de La Roja ha durado exactamente 53 días, los que han transcurrido desde que un gol de Oyarzabal en Berlín permitió abrazar la cuarta Eurocopa de la historia, récord entre los récords del Viejo Continente. Ese vuelo de euforia aterriza esta noche en Belgrado, donde España se reencuentra con la competición en la primera jornada de la Nations League de la que también es defensora del título (sigue el partido en directo en As.com). ¿Nos estamos acostumbrando a vivir por encima de nuestras posibilidades? Por lo pronto, lo único que preocupa es sumar una victoria frente a Serbia que permita coger inercia rumbo a los siguientes objetivos de la Selección: la Finalissima de 2025 (con Argentina como rival) y el Mundial de 2026 que organizan Canadá, México y Estados Unidos.

En Belgrado hay ganas de fútbol, casi tanto como ganas de fresco. No es lógico que a estas alturas del año sus ciudadanos persigan la sombra ante los 35 grados previstos para hoy y que han obligado al Instituto Meteorológico Serbio a activar la “alerta por calor excesivo”. Ese, el termómetro, será uno de los rivales para una selección que últimamente vive de sofoco en sofoco y que este mismo martes sufrió su último terremoto con la destitución del secretario general de la Federación, Jovan Surbatovic.

Sí, es cierto que en la RFEF tampoco se viven días de vino y rosas, pero el título de la Eurocopa y, sobre todo, la buena imagen que ofreció la Selección en Alemania, animan a centrarse en lo que sucede alrededor del balón más que en lo que ocurre en los despachos de Las Rozas. Luis de la Fuente lo sabe, del mismo modo que es consciente de que el listón se ha elevado a tal altura que a partir de ahora solo se admitirá la excelencia. Para ese reencuentro con la competición, el seleccionador decidió retocar parte de la estructura que tan buenos resultados dio este verano. Uno de los cambios fue obligado, pues Jesús Navas decidió poner punto y final a su periplo en la Selección. La Eurocopa fue el brillante colofón a la carrera del único de los supervivientes del título mundial de 2010. Uno se va y otros llegan, como Mingueza y Pepelu, las dos grandes novedades en la lista de convocados para los partidos de Nations League que aguardan en este parón de septiembre: hoy, frente a Serbia en Belgrado, y el domingo, ante Suiza en Ginebra.

Robert Sánchez, Pau Torres, Aleix García y Yeremy Pino también regresaron a ese bloque en el que todo son sonrisas a tenor de las fotos que han dejado los entrenamientos de estos días en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. El último, ayer por la mañana antes de volar a Belgrado.

Cambios en el once de De la Fuente

Allí, sobre el césped del bautizado en su día como Pequeño Maracaná, ahora estadio Rajko Mitic en honor al mítico futbolista del Estrella Roja, la Selección española mostrará un aspecto ligeramente diferente al que cautivó a todos durante la Eurocopa. De la Fuente no podrá contar con la que se entiende como la columna vertebral del equipo, que integran Unai Simón, Rodrigo y Morata. El guardameta del Athletic estará unos tres meses de baja tras operarse a mediados de julio de la “inestabilidad escafoide-semilunar” que sufría en su muñeca derecha. Mientras, el centrocampista del Manchester City y el delantero del Milan cumplen el partido de sanción impuesto por la UEFA por sus cánticos de “Gibraltar es español” durante la celebración en Madrid del título de la Eurocopa; en el caso de Morata, el jugador padece además una lesión muscular sufrida en la primera jornada de la Serie A, en la que marcó en el empate ante el Torino (2-2).

Ante esos contratiempos, es presumible que David Raya sea quien esté bajo palos y Zubimendi ejerza de batuta en la medular; surgen más dudas en la punta de ataque, donde Olmo parece haber ganado enteros para discutirle la titularidad a Joselu. Lamine, mientras, sufre molestias y es duda.

Enfrente, Dragan Stojkovic también tendrá que repartir de nuevo las cartas, pues la ausencia sin justificación de Vlahovic y las obligadas por molestias físicas de Mitrovic y Milinkovic-Savic complican el panorama para un duelo al que Serbia llega con el mal sabor de boca que dejó la Eurocopa, en la que el equipo no logró pasar de la fase de grupos. Esa misma Eurocopa que devolvió a España a lo más alto del Viejo Continente. Cincuenta y tres días después hay que dejar claro que aquello no fue un sueño. .

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