Víctor Fernández. Episodio IV: una nueva esperanza para el Zaragoza

El Espanyol estrena entrenador en La Romareda, el tercero de la temporada, pero el regreso de Víctor Fernández al banquillo del Real Zaragoza, también como su tercer técnico de esta campaña, acapara, inevitablemente, el protagonismo del partido entre dos históricos de nuestro fútbol en horas bajas. La vuelta de Víctor es puro zaragocismo en vena, una sacudida de entusiasmo que propiciará una noche de lleno rebosante y de emociones fuertes, después del desdichado paso de Escribá y, sobre todo, de Velázquez, al que todo le vino grande en el Zaragoza y que deja un equipo destrozado en todos los aspectos (sigue el partido de hoy en directo en As.com).

Veremos qué ha podido cambiar Víctor Fernández en el Zaragoza en apenas cinco entrenamientos, y si su mano y su experiencia se empiezan ya a notar para conseguir una victoria que se le resiste al equipo aragonés desde hace seis jornadas, pero seguro que el Zaragoza dejará al menos de ser ese bloque amanerado, encorsetado y reservón de prácticamente toda la temporada. Veremos si le alcanza para ganar al tercer clasificado, pero lo que es seguro es que será un conjunto valiente y ofensivo. “No podemos ser un equipo cagón”, recalca el entrenador aragonés, quien reclama a sus futbolistas “confianza, personalidad, valentía, atrevimiento y descaro”. Nada nuevo bajo el sol, pese a iniciar su cuarta etapa en el banquillo de La Romareda.

Para empezar, Víctor prescindirá de la defensa de cinco, casi una ofensa en la historia del Zaragoza, y todo hace indicar que apostará por un 4-2-3-1, con Mouriño y Lecoeuche en los laterales, Jair y Francés en el eje de la defensa, Francho y Toni Moya en el doble pivote, Valera, Maikel Mesa y Mollejo en la media punta y Bakis como ariete. No puede descartarse que el juvenil Liso actúe al final en la banda izquierda y que Mollejo juegue de falso ‘9′, pero, en cualquier caso, es una ruptura total con todo lo anterior.

Por su parte, hoy se verá un Espanyol diferente en La Romareda. Algo obvio con el cambio de entrenador, pero que va a ir más allá de unos cambios en el once que son evidentemente una incógnita. Del planteamiento conservador de Ramis, a ratos simplón, al Espanyol ambicioso de Manolo González. Un técnico que ha repetido por activa y por pasiva que su equipo va a ir a atacar, que va a salir a ganar, que va a ir a por el partido. Algo que ha demostrado allí donde ha entrenado. Una novedad de los blanquiazules esta temporada, especialmente fuera de casa, y que debe ser la clave para lograr el ansiado ascenso. Quedan 12 partidos y ya no se vale especular.

Una de las certezas que existen sobre el once es la titularidad de Joan García en portería. Porque Pacheco sigue tocado, pero también porque Manolo González cree de forma férrea en la meritocracia. Y Joan está jugando bien. Con Braithwaite arriba, al fin y al cabo es el mejor delantero de la categoría, es altamente probable que Manolo González pueble más el centro del campo que su antecesor. Al final tener el control del balón es la mejor manera de someter al rival y para tener el balón siempre es preferible jugar con más centrocampistas. Además, Manolo González es un entrenador que se adapta bien a las plantillas que maneja y en esta, si algo falta, son extremos. Hoy uno más de la cuenta, pues Salvi está sancionado. Por contra, regresa a la lista Nico Melamed, lesionado el pasado 28 de octubre.