Vadillo ‘in extremis’ salva un punto para el Racing de Ferrol

Reparto de puntos entre Racing de Ferrol y Cartagena que dejó con mejor sabor de boca a los locales y dieron un duro golpe a los albinegros que remaron para terminar muriendo en la orilla con una estocada a nivel anímico. Los de Cristóbal Parralo mantienen su imbatibilidad en casa y siguen con buen ritmo en busca de su objetivo.

Salió el Cartagena valiente al encuentro con la misión de meter en problemas al Racing de Ferrol desde el pitido inicial. Tan solo hicieron falta segundos para el primer aviso de los visitantes con una llegada de Jansson que hizo que Cantero tuviese que estrenar sus guantes para despejar el balón picado por el sueco. El Cartagena impuso su idea en un primer tramo de partido en donde el Racing, estuvo a merced de los ataques de los de Julián Calero con control y orden.

El Racing de Ferrol dio un paso adelante y se fue poco a poco deshaciendo del dominio del Cartagena. Sobre todo con la asociación Iker Losada y Carlos Vicente, que en un tuya mía, terminó con el mediapunta buscando portería con un disparo que se marchó fuera por muy poco al que incluso pudo llegar Heber en el segundo palo. A pesar de la soltura de los verdes durante unos minutos, los albinegros con una telaraña pegajosa en la medular liderada por Mikel Rico, no permitía estar cómodos a los gallegos sobre el terreno de juego sabedores de que necesitaban los puntos como el comer.

Fue en una jugada aislada en la que pocos de los presentes se percataron, incluido el colegiado, cuando el Cartagena se puso por delante. Tras revisión del VAR en varios minutos de deliberación, el árbitro decretó pena máxima por mano clara de Jon García. Se encargó de ejecutar la pena máxima Juan Carlos Real, que desde los once metros, engañó a Cantero para poner el 0-1 en el luminoso. El desconcierto y los silbidos en contra del árbitro que acertó en su decisión, cerraron una primera parte bronca y con pocas ocasiones en A Malata, echando más leña al fuego en el añadido con una caída en el área del Cartagena en la que no entró el VAR ante el enfado del público.

En la segunda mitad los de Cristóbal Parralo trataron de ser más incisivos desde el inicio. Arrancaron a los pocos minutos con un buen balón filtrado entre líneas de Jon García, que dejó a Carlos Vicente solo ante un Marc Martínez que se hizo grande para despejar el balón. A pesar de tener hasta tres jugadores pendientes, Carlos Vicente saltó desatado en el segundo asalto y de nuevo exigió a Marc Martínez, esta vez, con un disparo que buscaba la escuadra con una excelsa respuesta del meta. El Cartagena daba un paso atrás y el Racing de Ferrol se lanzaba en tromba a por la igualada.

Julián Calero quiso ponerle cloroformo al encuentro e introdujo cambios para insuflar oxígeno a los suyos, con la entrada de Alarcón y Luis Muñoz. Respondió también Cristóbal Parralo desde su banquillo e introdujo a Álex López, Bernal y Sabin Merino para terminar jugando con dos delanteros. Mayor presencia ofensiva para los locales y los visitantes buscaban matar el partido a la contra. Avisó esta vez Álvaro Giménez que cazó el cuero dentro del área, pero de nuevo el muro Marc Martínez estaba atento para meter una mano abajo providencial. El Racing de Ferrol estaba poniendo todos los cimientos para tratar de marcar, pero el orden solidario del Cartagena apagaba las opciones de los gallegos. Lo pudo matar a la contra Luis Muñoz en clara superioridad, pero su disparo se marchó alto. Siguió intentándolo hasta el final el Racing de Ferrol y cuando parecía que se terminaba el encuentro, sobre la bocina, un debutante en A Malata como Álvaro Vadillo acertó desde falta directa para terminar dando un empate que sabe a gloria para los gallegos. El Cartagena tras remar durante todo el partido, se tuvo que contentar con un punto que sabe a muy poco y no arregla los problemas clasificatorios del equipo de Julián Calero.

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