Uzuni y Boyé alargan la fiesta de Los Cármenes

El Granada volvió a ganar y ya son tres victorias consecutivas para colocarse en la zona alta y recuperar una sonrisa que hacía año y medio que no pasaba por Los Cármenes. Con la afición volcada y Uzuni y Boyé en racha, los rojiblancos golearon al colista Tenerife que se hunde un poco más en la clasificación...

El Granada volvía a Los Cármenes tras ganar su primer encuentro en casa hace sólo una semana. Esta vez visitaba el colista, que además llegaba en cuadro. Hasta ocho canteranos en la convocatoria con medio equipo lesionado. Fran Escribá pensaba no sólo en este envite, sino también en el del miércoles en Castellón. Por eso, hubo novedades. Pablo Sáenz y Corbeanu ocuparon las bandas, Trigueros acompañó a Villar y arriba por primera vez Uzuni y Boyé. Le salió bien la apuesta al valenciano. Desde el inicio, los nazaríes mandaban sobre el césped, con una gran presión tras pérdida y mucha mordiente arriba. Así, a los cuatro minutos lo intentó Uzuni desde fuera del área, pero Salvi apareció. El meta era el mejor de los tinerfeños, que vio como el albanés no llegó de milagro al centro de Trigueros tras una gran presión arriba y entendiéndose muy bien con Corbeanu. También pudo marcar Boyé, pero no llegó tras un gran centro de Villar. Se mascaba el tanto rojiblanco mientras el Tenerife buscaba a Luismi Cruz, el jugador más desequilibrante. Tuvo un remate Gayá, otra de Enric, pero en fuera de juego.

Entonces, en el minuto 19, llegó el gol. Gran jugada de Villar que vio a Pablo Sáenz en izquierda, el navarro puso el centro al área pequeña y allí llegó Uzuni para tirarse en plancha y anotar el primero del partido. Un tanto que daba tranquilidad a los rojiblancos y obligaba a los tinerfeños. Pero ni por esas. Los insulares no aparecían, con poca intensidad y sin presionar a un Trigueros y un Villar que tenían tiempo para pensar y organizar. Pudo sentenciar Corbeanu tras otro robo arriba de Uzuni que se la dejó al rumano-canadiense, pero este intentó devolverla sin éxito. Lo intentó Ricard también. Pero tuvo que ser Uzuni. El príncipe de Albania, al fin, está encontrando su mejor forma. Una gran jugada en Boyé que asistió a Uzuni quien no falló ante Salvi. El Granada tenía el partido donde quería, aún así, Boyé pudo marcar su gol tras una jugada con Uzuni, también la tuvo Pablo Sáenz.

Tras la reanudación, el Tenerife dio un paso adelante. Y, nada más salir, Corbeanu pudo anotar el tercer, pero Salvi evitó el tanto y en el rechace León rozó con la puntera el balón para que Pablo no pudiera empujarla a la red. Quería Pablo Sáenz su gol y a punto estuvo. Porque diez minutos después, Uzuni se quedó casi delante del portero, pero se la dio a Pablo, sin embargo, Salvi sacó el balón con una espléndida parada. Poco generaba el Tenerife y el Granada quería más. Uzuni tuvo su hat-trick, pero de nuevo apareció Salvi.

El Tenerife consiguió retener algo el balón, mientras Escribá hacía rotaciones pensando en Castellón y activando a toda su plantilla. Los de Mel merodeaban el área de Mariño pero el gallego no tenía que intervenir. Y, con espacios, podía matar mientras Los Cármenes, por primera vez en año y medio, disfrutaba. Y se unió a la fiesta Lucas Boyé tras un pase de Hongla buscando la carrera de Ricard que encontró al argentino. Boyé, desde dentro del área, mandó el balón a la escuadra para quitarse una losa de encima. Aún pudo aumentar la renta el Granada. Y lo hizo en la última jugada del partido. Un córner que fue al pecho de Diao que, sin querer, asistió a Boyé para que firmase también su doblete. Escribá ha cambiado a este equipo que ya sí sueña con el ascenso, el Tenerife sigue a la deriva…

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