Superioridad numérica, victoria incierta
La U.D. es el equipo de Segunda que ha visto más rivales expulsados antes del descanso.
Un saque de falta que busca y encuentra la espalda de la defensa a un infiltrado —en fuera de juego—; un portero que se percata del peligro y esprinta; un balón dividido; un choque con un pie a la altura del estómago; un dolor terrible; un expulsado a los quince minutos: Juan Muñoz. Esta fue la cuarta tarjeta roja que vio un rival de Las Palmas antes del descanso en lo que va de temporada. Lo que la coloca como el equipo que más rivales han sido expulsados durante la primera parte en Segunda. Uno más que Zaragoza y Granada. Y nuevamente, lo contrario a un día sencillo en el trabajo.
Los precedentes: Racing de Santander, Ponferradina, y Cartagena. El mínimo común denominador: Jonathan Viera. Ante el Racing fue Pombo en el 41′, contra la Ponferradina fue Yuri en el 27′ y contra el Cartagena, Pablo Vázquez veía la segunda amarilla en el 42′. Todas las faltas fueron comedidas sobre el capitán amarillo.
De esos cuatro partidos, Las Palmas cosechó dos victorias y dos empates. Las victorias no llegaron con la suavidad de un batín de seda, sino como podar una tunera en agosto. Ante la Ponferradina el tanto llegó en la misma acción continuada de la expulsión. El huevo llegó al mismo tiempo que la gallina y ahí se acabó la producción goleadora. Contra el Cartagena el tanto de la victoria lo marcaría Viera en los últimos minutos cuando el partido se precipitaba por el risco.
En los otros dos partidos, frente al Racing y el Leganés, los amarillos no pudieron capitalizar la ventaja de efectivos. A pesar de sumar más 128 minutos en ventaja númerica. Lo que sumado al tanto en los minutos finales frente a los cartageneros evidencia lo complicado que le supone a Las Palmas romper las defensas rivales cuando completan el aforo en el área.
Sin embargo, lejos de ser una anomalía, el comportamiento de los amarillos se sitúa en el promedio de la categoría. En total son 25 los partidos con expulsados en la primera parte en Segunda. Y la realidad se encuentra lejos de la presunción de que un jugador más es igual a victoria segura. Los equipos con un futbolista más desde antes del descanso ganan un 48% de los partidos. Es decir, lo más probable hasta el momento es no sumar los tres puntos.
Acabar derrotado teniendo un jugador más al descanso ocurre un 28% de las veces y empatar un 24%. Como muestra vale el dorso del botón de Las Palmas. Ante el Villarreal B Mfulu fue expulsado al cuarto de hora. Resultado final: una victoria.
Se da la circunstancia además que de los ocho equipos que se han visto en más de una ocasión en superioridad numérica desde antes del descanso, tanto solo el Leganés consiguió un pleno de victorias, dos sobre dos. En el lado opuesto está el Zaragoza, con tres partidos con uno más desde la primera parte, dos empates y una derrota.