REAL ZARAGOZA

Sanllehí: “Mi grado de satisfacción y de confianza en Torrecilla y Carcedo es altísimo”

El director general teme que la afición pierda la ilusión por la segunda parte frente al Lugo, hace una encendida defensa de Cuartero y anuncia dos próximas renovaciones: Francés y Bermejo. El director deportivo: “La nota me la pondré al final de mi etapa aquí”.

Zaragoza
Alfonso Reyes

Estaba prevista de antemano, pero la conferencia de prensa conjunta de esta mañana de Raúl Sanllehí y Miguel Torrecilla ha sido de lo más oportuna, porque las cosas se han puesto muy difíciles muy pronto para el Real Zaragoza. Después de la debacle frente al Lugo, el equipo está en posición de descenso y ya se empieza a poner todo en cuestión, lo que ha permitido al director general y al director deportivo salir al paso para responder a todo tipo de preguntas y poder hacer una entusiasta defensa de su proyecto, del que se muestran convencidos. No hay autocrítica por ahora.

Sanllehí fue el primero en tomar la palabra. Después de recordar los puntos esenciales de la estrategia de la sociedad anónima deportiva, con sus pilares deportivo, financiero y de infraestructuras, resaltó su apoyo incondicional al director deportivo y al entrenador: “Mi grado de satisfacción y de confianza en Torrecilla y Carcedo es altísimo”.

Inmediatamente, hizo un análisis técnico-táctico de los cuatro primeros partidos, algo sorprendente en un director general cuando tenía sentado a su lado al director deportivo, y se esforzó por combatir el alarmismo: “La segunda parte frente al Lugo nos decepcionó a todos. No voy a vender humo. Pero de ahí a hablar de desastre, sin contar con las tres primeras jornadas, no es un discurso realista. Hemos hecho tres partidos y medio buenos. Hay que huir del resultadismo y de lo ocurrido en la segunda parte del domingo. Cuestionar al entrenador ahora está fuera de lugar”.

Cogió después el micrófono Torrecilla para numerar las 23 operaciones del mercado de verano (once salidas, cinco renovaciones y siete fichajes) y señalar que queda un dorsal sin cubrir en la plantilla: “Seguimos atentos y estudiando el mercado del paro, pero hemos conseguido ya doblar todas las posiciones y en todos los sistemas tácticos”.

Y ahí ya empezó el turno de preguntas:

A Sanllehí se le preguntó por qué el ‘9′, la mayor urgencia, había llegado el penúltimo día del mercado. Y su contestación fue la siguiente: “El fichaje de Gueye se produjo al final, pero la negociación ha durado dos meses. Y hemos conseguido una de nuestras mejores opciones. El jugador y su agente entendieron enseguida el proyecto y nos ayudaron mucho en una negociación muy difícil”.

Sin desvelar cifras, Sanllehí explicó después que el traspaso de Narváez al Valladolid no es a coste cero: “Es una cuestión privada y no la puedo detallar, pero no se ha ido gratis. Él quería jugar en Primera División y para nosotros no era imprescindible. Le quedaba sólo este año y no lo íbamos a renovar. Se quería ir, aunque declinamos las ofertas que hubo de clubes de Segunda por él”.

¿Y Chavarría?: “A Pep no lo vendimos hasta que tuvimos un relevo. Era un titular, pero hizo mucha presión para irse. No lo queríamos vender. Vino a mi propia casa a hablar y le dije: “Te necesitamos para ir a Primera”. Pero él no dejó de insistir. Torrecilla reaccionó muy rápido, encontramos un sustituto en Fuentes y entonces lo vendimos al Rayo. No fue un tema económico, fue un tema humano”.

Continuando por nombres propios, Torrecilla relató así la apuesta por el senegalés Gueye: “Lo teníamos trabajado desde hacía mucho tiempo. Yo lo conocía de mi etapa en Bélgica, donde tuvo un rendimiento espectacular”. Y negó que el club haya buscado o busque un extremo zurdo con regate y desborde: “Ya tenemos cuatro extremos: Puche, Bermejo, Mollejo y Larrazábal. No es urgente ni estratégico fichar a un nuevo extremo”.

Este viernes LaLiga hará públicos los límites salariales de Segunda División. Y al respecto, Sanllehí advirtió que el Real Zaragoza se guarda un pequeño margen para el mercado de invierno, aunque aclaró que “estamos muy satisfechos con la plantilla que tenemos”.

Torrecilla anunció después que se está estudiando una cesión de Lasure a un club extranjero, ya que aún quedan cinco o seis mercados abiertos, e intentó explicar a su manera por qué no se ha acometido una renovación general de la plantilla cuando el Zaragoza viene de dos años coqueteando con el descenso: “La temporada pasada el equipo no logró su objetivo –la famosa y dichosa ‘pomada’- por la debilidad del gol. Con gol, hubiéramos estado en la lucha. Ahora hemos traído tres jugadores ofensivos y hemos cambiado por completo el frente de ataque. Hemos hecho un cambio drástico en la delantera”.

El director deportivo, muy contestado entre el zaragocismo, no quiso ponerse nota sobre su desempeño en el club aragonés: “Todos tenemos fecha de caducidad. Y espero despedirme del Real Zaragoza en Primera. Doy las gracias a los que me dieron esta oportunidad y a los que decidieron que continuara. Estoy viviendo una experiencia muy potente y enriquecedora. La nota me la pondré al final de mi etapa aquí”.

Raúl Sanllehí acaparó la gran mayoría de las preguntas, y cuando se le interrogó por la renovación de Francés, dio a entender que su anuncio va a ser inmediato, junto al de Bermejo: “Estamos muy cerca de dar dos muy buenas noticias. Estamos a punto de cerrar dos renovaciones importantes”.

Donde no quiso arriesgar el director general fue en el objetivo del Real Zaragoza en esta temporada, pese a las últimas palabras del presidente Jorge Mas: “El grupo inversor quiere evitar la impaciencia. El objetivo es llegar lo antes posible a Primera, pero para quedarnos. Nuestro objetivo es competir en cada partido. Y eso nos llevará adonde queremos ir. No hay año de transición. Tenemos intención de poner al Zaragoza donde se merece, pero no nos marcamos un periodo de tiempo”.

Sanllehí hizo después una encendida defensa de Cuartero cuando se le preguntó por el ex director general del club y su anunciada marcha cuando acabara esta ventana del mercado: “Charly tiene un zaragocismo exacerbado. Me recibió con los brazos abiertos, aunque yo era su sustituto. No me escondió nada. Me ha ayudado enormemente. Sus consejos me han servido muchísimo. Este club lo ha pasado muy mal, pero gracias a personas como Cuartero sigue vivo. Le pedí que se quedara hasta septiembre y ahora tenemos que volver a hablar, aunque sé cuál es su deseo. El tiempo le pondrá en su sitio. Ha hecho unos sacrificios inigualables por el Zaragoza. Hasta ahora ha actuado de asesor mío y ha facilitado la transición”.

Raúl Sanllehí negó después que el Real Zaragoza le planteara a los jugadores un recorte salarial del 10% por problemas con el límite salarial para poder fichar y explicó que lo que quiere, como ya desveló AS el pasado mes de junio, es cambiar el sistema retributivo de la plantilla: “Después de negociar la prima de ascenso, les brindé a los futbolistas la posibilidad de cobrar mucho menos de fijo y mucho más de variable, si se logra el ascenso. Es algo voluntario y no tiene nada que ver con el límite salarial, que quede caro. No es una necesidad económica. Y tengo que decir que estamos muy satisfechos por la respuesta de una gran parte de los jugadores”.

El director general no quiso abundar en el reparto accionarial del Zaragoza –”Me da igual, porque todos actúan unidos y trabajan de forma consensuada. Es un grupo complejo, pero unido”-, y sí mostró su preocupación por que el zaragocismo y sus ya 25.500 abonados caigan pronto en la decepción: “Me da miedo que se pierda la ilusión. Sólo pido que no se pongan palos en la rueda. La afición tiene derecho a pitar, pero en este barco estamos todos juntos. Agradezco y respeto la crítica, porque nos hace estar más alerta, pero vale la pena dar un voto de confianza a lo que se está haciendo. La Romareda nos tiene que dar medio ascenso con su apoyo”.

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