Renovación en la sala de máquinas

Salvo sorpresa mayúscula, no será muy difícil acertar el doble pivote que usará Luis Miguel Ramis el próximo sábado ante el Racing de Santander ya que debido a la plaga de bajas en esa posición, los únicos profesionales con los que dispone el míster son Alexandre Corredera y Sergio González.

Y eso que se trata de una de las zonas del campo mejor cubiertas, pero se han acumulado los contratiempos. Aitor Sanz fue expulsado en Valencia y deberá ver el partido desde la grada, mientras que José Ángel Jurado, el otro titular ante el Levante, se ha lesionado y tendrá para un mes.

Pablo Larrea y Javi Alonso se recuperan de sus dolencias y todavía no se les espera, mientras que los canteranos Teto e Ibra podrían jugar allí, aunque Ramis no es muy amigo de apostar por los jóvenes. Otra opción sería adelantar a Carlos Ruiz, pero sería trastocar demasiado al equipo.

Así las cosas, el catalán y el cartaginés son los favoritos -y casi los únicos-. El primero de ellos, además, no está al cien por ciento debido a unas molestias en el pie, pero llega algo más descansado después de no haber estado el pasado fin de semana por sanción.

Será la segunda vez que partan de inicio juntos en el doble pivote porque ya lo hicieron en el tramo final de la temporada pasada en Ipurúa ante el Èibar (2-0). Aunque para Ramis Sergio jugó más veces de central, cuando llegó al Tenerife lo hizo para reforzar el centro del campo por lo que no será para él ninguna novedad.