Recuperación o revancha en el Carlos Tartiere

No hace tanto, el pasado junio, los enfrentamientos entre Oviedo y Eibar se volvieron habituales: se jugaron 3 en semana y media. Y a un nivel altísimo de revoluciones: la última jornada de Liga y la primera eliminatoria de playoff. Salió mejor parado el Oviedo de aquellas citas y por eso para el Eibar el choque tiene un regusto a venganza (sigue el partido en directo en AS.com). Los azules, por su parte, se encuentran ante una oportunidad única para reivindicarse y dejar de lado las dudas que están acompañando al equipo en este inicio de competición. Hoy, a las 18.30 horas, hay más que tres puntos en juego.

Ambos han cambiado de forma notable en sus proyectos. Muchos nombres se han ido y han llegado nuevas piezas. Pero la sensación en ambos casos es que los dos, Oviedo y Eibar, están más que bien situados en el pelotón de candidatos de este año al ascenso. Lo ha demostrado hasta la fecha el conjunto armero, que aún no ha perdido en las seis jornadas disputadas: tres victorias y tres empates. Con el Oviedo, es más el nivel de la plantilla que el juego demostrado hasta la fecha. Pero ambos casos parecen encaminados a estar allá por mayo en la disputa de las cosas importantes.

Necesidad azul

Para el Oviedo de Calleja es más una oportunidad que un marrón. Porque necesita el equipo de un triunfo convincente. Uno sin peros. Algo que no ha sucedido hasta ahora. Ha dejad algunos detalles el equipo, también se ha resbalado en otros, pero falta esa actuación convincente que suponga un puñetazo encima de la mesa.

Tiene Calleja a todos sus jugadores sanos, con la excepción ya conocida de un Fede Viñas que sigue recuperándose del Aquiles en México. Regresa a la lista Paulino tras su castigo la semana pasada. Y podría haber alguna novedad en el once, con Santi Cazorla apuntando a jugar de inicio tras su descanso necesario en la duelo de Elda. También ha admitido el entrenador que se plantea cambiar a Hassan y Chaira de sus respectivas bandas en busca de más agilidad en el ataque.

La herida armera

Apenas cuatro meses después de ser apeados del playoff de ascenso, el conjunto armero quiere cobrar su particular venganza. A base de triunfos y algún que otro empate significativo, la herida, aún abierta, entra en la última fase de su recuperación. De manera que una victoria en el Carlos Tartiere podría ayudar a cicatrizarla. En clave azulgrana, la del Oviedo es una cita marcada en rojo. Además de ser un desplazamiento atractivo para su hinchada, la rivalidad fraguada en las últimas temporadas, añade picante a un duelo en el que se enfrentarán dos plantillas con capacidad para optar a todo. Sin todavía conocer la derrota, el equipo gipuzkoano prolonga con empates la dinámica positiva a la espera de recuperar su mejor juego.

Ante el Almería, los de Joseba Etxeberria rozaron su mejor versión hasta la fecha en una primera parte meritoria. Aunque la avalancha final de los indálicos, debido en parte a las sustituciones obligadas de los armeros, acabó por mermar el premio. Jon Guruzeta, quien será baja en las próximas jornadas, tuvo que abandonar el verde, a causa de un traumatismo agudo en su tobillo. Al igual que lo hicieron Puertas, Bautista y Arambarri, tras acusar una indisposición. La misma que dejó a Nolaskoain en casa. Sin embargo, estos cuatro ya están plenamente recuperados, y apuntan al once en el Tartiere. Mientras que ‘Guru’, acompañará a Jonmi en la enfermería. El lugar del mediapunta, una de las pocas dudas del once, podría ser nuevamente ocupado por el canterano Mada.

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