Ramis baila sobre el alambre: ‘Levante’ o caída

No va más para Ramis: victoria o su presente como técnico del Espanyol tocaría a su fin. El gris no existe este domingo para un Espanyol que se juega algo más que tres puntos contra el Levante (sigue el partido en directo en As.com). El hartazgo entre la afición es tal que el Stage Front Stadium será, desde el inicio, un polvorín. Y ya veremos si acaba explotando o el partido sirve de extintor. Lo que es seguro es que aquí querrá pescar un Levante que llega con colmillo afilado y sabedor que un triunfo le devolverá a los puestos de playoff. Esos a los que el Espanyol dijo adiós el pasado viernes tras el triunfo del Elche ante el Burgos. Lo positivo para ambos es que dependen de sí mismos: el triunfo te mete entre los seis primeros clasificados.

Hay dos vías para subir a Primera, la corta, por el ascenso directo, y la larga, por el playoff. Y el Espanyol, actualmente, está descarrilado porque no va por ninguna. Está fuera de los puestos de playoff y si no gana al Levante seguirá ahí. La situación sería todavía más insostenible porque un club como el perico, con su historia y masa social, está tocado.

Pere Milla dijo el pasado miércoles que si no se gana al Levante “no se acaba el mundo”. Puede ser, pero lo que sí que se acabaría sería el periplo de Ramis como técnico del Espanyol. Llegó para suplir a Luis García en la jornada 15 y el equipo sumaba 24 puntos (a dos del ascenso directo) y era quinto clasificado, Ahora, diez partidos de Liga después, solo suma 14 puntos más (38) y es séptimo. Los puestos de ascenso directo los vislumbra a tres puntos de distancia, es decir, que el Espanyol está peor. Los números no engañan. Ha ganado un partido de los últimos siete en Liga, así que blanco o negro, cielo o infierno. Esta semana, pese a aguantar en el cargo, ya empezaron a sonar sustitutos, como Paunovic. Nada ayuda un club maltrecho y en el que cada día que pasa parece estar más alejado de la luz que le muestre la salida del túnel. Ramis dijo quererse alejar de la oscuridad y para ello, solo las victorias dan claridad.

Si hay que remar a favor, se rema. El Espanyol solo ha ganado el 42 por ciento de los partidos esta Liga y es un balance incompatible con el objetivo del ascenso, ya sea por la vía directa o por el playoff. Pero el fútbol, como el conjunto perico, es impredecible: capaz de volar en situaciones límite. Está inmerso en una de ellas y los jugadores deben dar un paso al frente. Vuelve Omar El Hilali tras cumplir su partido de sanción y lo haría directo al equipo titular. Ramis avazó que haría “de tres a cuatro cambios”, así que podrían jugar de inicio Ian Forns (Brian Oliván está tocado y es duda), Gragera y Keita Baldé. Puado sigue lesionado y su sustituto vuelve a ser un quebradero de cabeza. Salvi no brilló ante el Eldense y tampoco Jofre. De ahí las dudas. En cuanto a Rubén Sánchez, repescado del Mirandés este invierno, está para jugar. Un nuevo activo, Ramis le quiere para el lateral derecho, para intentar remar hacia delante.

En cuanto al Levante, tiene una espina clavada por la dolorosa derrota (1-4) sufrida ante los pericos en la primera vuelta en el Ciutat de València. Hasta la fecha, el único partido de la temporada en el que los granotas se han visto claramente superados por su rival. Actualmente encadenan dos empates seguidos y Calleja ya está tranquilo tras el agitado final de mercado por la salida de Ruben Vezo y los cantos de sirena por parte del Granada hacia su máximo goleador, Mohamed Bouldini. Este sigue, así que calma. El técnico levantinista afirmó en la previa que solo el tiempo dirá si se ha empeorado o mejorado la plantilla con la salida de Vezo y la incorporación de Maras, que tan solo ha participado en tres partidos de Copa en el Alavés esta temporada antes de recalar en Orriols. Es por ello que, en un principio, Dela y Postigo se pelean por ser el acompañante de Álex Muñoz en el centro de la defensa. No estará, seguro, por lesión Algobia, que venía siento titular en las últimas cinco jornadas, aportando el equilibrio buscado en la medular. Por lo que Sergio Lozano, que precisamente se estrenó como pivote junto a Oriol Rey frene al Espanyol en la primera vuelta, recuperaría su estatus de titular.