Pumar se ‘despide’ del Racing de Ferrol: “Puedo seguir sumando fuera del campo”

Desde los difíciles tiempos del Racing en Tercera hasta los focos del fútbol profesional, Fernando Pumar, a sus 34 años, se echa a un lado por el bien del club y deja su ficha al recién llegado Óscar Pinchi. Entre lágrimas, el lateral del conjunto verde que ha vestido la camiseta del Racing en 158 ocasiones en dos etapas distintas, por problemas físicos, no podrá defender al equipo ferrolano en el terreno de juego, pero lo continuará haciendo en el día a día hasta final de temporada para seguir remando en la misma dirección en busca de los objetivos del club. Trabajador, humilde y con la modestia por bandera, deja su hueco herido en el alma por no poder debutar con el Racing en Segunda, pero feliz por la situación que está atravesando la entidad. Fernando Pumar repasa sus años en el Racing y explica las razones de su paso al lado en el equipo:

Estado físico: “Se intentó y se buscó desde pretemporada el intentar competir bien para estar disponible y entrar en dinámica con el equipo. Ahora mismo voy más con las ganas de poder debutar y poder sumar que de estar físicamente bien. Hay molestias, limitaciones y problemas físicos que noto que no me dejan ir al cien por cien en una categoría que es muy exigente. En pretemporada teníamos la idea de estar más en dinámica y poder sumar en el terreno de juego, aunque ahora la situación es otra con molestias que me impiden estar al nivel que exige la categoría. Pienso que puedo seguir sumando, aportando fuera del campo en los entrenamientos por lo que la idea es seguir hasta junio intentando solventar esas molestias que voy teniendo. También seguir sumando por el equipo ayudando a pelear por los objetivos. Simplemente es eso, no me da para estar a tope”.

Dinámica de grupo: “La idea es seguir en dinámica con el equipo hasta finalizar en junio el contrato. Es lo que llevo haciendo todo el año pasado con la lesión de cruzado y estos meses hasta ahora. En el día a día puede haber situaciones de que alguien se desconecta o se desconcentra y uno puede estar ahí para sumar o corregir algunas cosas que el cuerpo técnico está a otros detalles. Ayudar a los más jóvenes a que se metan en dinámicas de lo que es el fútbol profesional, cuando llegan las derrotas tener unas palabras de ánimo. En todo eso la experiencia es un grado para ayudar a que sigan creciendo compañeros, equipo y club”.

Sin debutar en Segunda: “Me hubiese gustado. Por un lado tienes esa ilusión después de toda una vida jugando playoffs y ascensos para jugar en Segunda. Te queda esa espinita pero pensándolo en frío, al final no me va a cambiar la vida haber jugado veinte minutos en Segunda o no. Me quedo tranquilo por las semanas que me encontraba bien, verme capacitado para competir. Al final son 34 años, dos cruzados y uno va con limitaciones, pero si me hubiese llegado la oportunidad habría jugado en Segunda y sé que podría competir”.

Etapas en el Racing: “Lo veo como toda mi vida. Cuando crecí y me hice futbolista fue aquí y ahora acabar aquí está muy bien. Esta segunda fue con más éxitos y alcanzando objetivos más ambiciosos que ya pensábamos en la primera etapa. Al final disfrutas de todas al principio haciéndote futbolista, ahora disfrutando más del momento que estamos viviendo que pueda que sea el mejor momento de la historia del club y estoy muy orgulloso de estar aquí en esta etapa”.

Presencia de compañeros: “Me quieren de más. Al final estos años que conseguimos estos objetivos con David Castro y Álex López son con los que más vínculo generas. También con Quique Fornos, Diego Rivas y en la primera etapa con Dani Rodríguez, Pablo Rey, Marcos Álvarez, Manu Barreiro o Iago Iglesias. Son muchos compañeros aquí con los que echas mucho tiempo y con el que más veces compartí vestuario sería con Heber. Son muchos compañeros con los que me llevo muchos recuerdos”.

Ascenso a Segunda: “Es el culmen al trabajo de toda la temporada el conseguir devolver al club a Segunda División. Pienso que a pesar de no poder aportar desde el campo fue un momento de alegría máxima. Además cuando acababa el partido que quedaban unos minutos, estábamos Joselu y yo en la cabina, ahí nos dimos un abrazo en un momento que me llevo para siempre”.

Ser más que futbolista: “No entiendo el fútbol sin competir, sin involucrarte y sin intentar que los demás rindan mejor y estén más a gusto. Así es como lo veo e intento hacer todo lo que está en mi mano para que ocurra, al final creo que la gente lo agradece, lo valora y aunque no notes siempre ese cariño pues cuando llegan momentos más importantes están ahí y se agradece”.

Sin mirar más allá de junio: “No tengo tomada una decisión y será más en estos meses de ver cómo puedo evolucionar y cómo me voy encontrando. Si al final puedo ir triando se verá, pero no miro más allá”.