Pacheta quiere ser profeta en su tierra

El Granada tiene puesto su objetivo en El Plantío para comenzar la remontada tras un inicio de temporada para olvidar. Un empate en cinco partidos es el balance de los partidos disputados. Pacheta regresa a El Plantío en unas circunstancias no deseadas, pero intentará con todos sus argumentos ganar en un estadio para él muy conocido y ante una afición que recuerda su paso como jugador local (sigue el partido en directo en AS.com). El técnico, natural de Salas de los Infantes, regresará a casa donde estará arropado por amigos y familiares en busca de esa balsámica y necesaria victoria

El problema para Pacheta y el Granada es que enfrente van a tener un equipo muy motivado tras su triunfo en El Molinón ante el Sporting en la pasada jornada, con una afición ilusionada y que presiona mucho desde las gradas y un equipo que empieza a valorar la posibilidad de acercarse a los puestos altos de la tabla si sale airoso de los dos compromisos consecutivos que tiene que afrontar en El Plantío.

Ramis recupera a Íñigo Córdoba, pero siguen lesionados Mollejo, Chapela y Expósito. La duda se centra en la posición de extremo izquierdo, ya que el técnico local deberá elegir entre el regreso de Íñigo Córdoba o dar continuidad a Appin que realizó un trabajo sobresaliente en Gijón en una posición nada habitual para el de Martinica. En el resto de demarcaciones no se prevén cambios con respecto a las últimas alineaciones.

Por su parte, el Granada juega una nueva final. Otro partido vital para no hundirse más como farolillo rojo y empezar a coger la confianza que el equipo necesita. Porque en lo que va de temporada el conjunto nazarí suma 11 partidos sin conocer la victoria. No ha ganado, ni en pretemporada, ni en liga, ni siquiera en el amistoso que jugó el pasado jueves ante el Jaén, recién ascendido a Segunda RFEF. Las sensaciones no son buenas, los resultados menos aún. Por eso, Pacheta se ha marcado estos partidos en rojo.

“En Jaén hemos aprendido mucho de todo lo que no debemos hacer”, decía el técnico antes de viajar a su natal Burgos. Para ello, el preparador anunció cambios porque en lo que va de liga no ha logrado mantener la portería a cero y, para más inri, ha encajado mínimo dos tantos por encuentro.

Así que podría darle una vuelta de tuerca al sistema. Parece que repetirá con tres centrales, pero podría optar por tres también en la medular y los carrileros más desplegados. En busca de solidez atrás y experiencia, podría optar con Alcaraz de central junto a Williams y Oscar. Darle madurez a la defensa con dos carrileros potentes en la faceta ofensiva, como pueden ser Alex Sola, de vuelta a la derecha, y Diallo, ya recuperado de su lesión.

Por delante, en la medular la gran novedad será Gagnidze, ya recuperado de su golpe en Jaén. El georgiano ya dejó pinceladas de lo que puede dar en el último partido liguero ante el Leganés y contra el Jaén fueron los mejores minutos rojiblancos hasta su lesión. Junto a él Sergio Ruiz y Alemao con permiso de Hongla que desde la vuelta de selección no ha jugado. Arriba, hay también dudas, aunque podría ser Arnáiz y Fayé para tener velocidad a la par que desborde. Aunque la primera premisa y más importantes es no encajar. Cerrar la portería, donde tanto Luca Zidane como Astralaga cuenta con opciones de defender, es fundamental para empezar a sumar y ganar en confianza. Otra final en septiembre para un Granada que se hunde cada día un poco más.

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