Operación Recuperar a Pejiño
El cuerpo técnico de Las Palmas se afana en buscar soluciones a las duras defensas que sufre. Su producción rematadora y regateadora, a la baja.
A la tercera va la vencida. Así se está desarrollando la trayectoria de Pejiño en la Unión Deportiva Las Palmas tras dos años iniciales de idas y venidas a cuenta de sus persistentes problemas físicos, ahora poco más que un mal recuerdo. Con un vínculo firmado con la entidad insular hasta 2024, el extremo de Barbate, canterano del Sevilla FC, va destapando todo el talento que atesora su bota izquierda.
Hasta el momento, en su mejor temporada en Gran Canaria, Pejiño acumula seis goles y dos asistencias en 1.624 minutos de juego. Sin embargo, en las últimas jornadas, víctima de su propio talento y embrujo con la pelota en los pies, el 24 de Las Palmas cuenta con trabajo extra incluso cuando intenta progresar con la pelota atada a su bota izquierda. “Ahora, cuando encara, tiene a tres futbolistas rivales encima”, recordaba ayer su entrenador, García Pimienta, quien siempre le insiste a su futbolista que pruebe fortuna con su eficaz disparo hacia la portería contraria.
Sea como fuere, la producción ofensiva de Pejiño, aquella beneficiada de su innata capacidad para sorprender a sus contrarios, se ha frenado en seco en esta dolorosa racha de resultados negativos como acumula Las Palmas, apenas una victoria en los últimos ocho partidos. Curiosamente, en el último triunfo de su equipo, en Albacete (1-2 jornada 34), no fue ni convocado por unas molestias. Su último gol se lo metió el 11 de marzo al Málaga en el 31º partido del presente curso, el pasado 11 de marzo, y desde entonces permanece seco. Aquel día, además, chutó cinco veces y le salieron bien 7 de los 10 regates que intentó. Una semana después, durante la hecatombe de Tenerife, salió airoso de 8 regates pero apenas pudo disparar una vez contra la portería chicharrera.
Poco después Las Palmas apenas le pudo secar el empate al Sporting, 1-1, cuando Pejiño regateó cinco veces y chutó tres. Ante Oviedo y Granada, saliendo desde el banquillo en ambos partidos, únicamente regateó tres veces y disparó una vez, esto sumando ambos duelos, mientras que hace una semana, contra el Levante, apenas salió airoso de dos intentos de gambetear y solo disparó en una ocasión.
Así pues, a García Pimienta y su cuerpo técnico les va la vida, empezando por Zaragoza, en encontrarle esos espacios tan provechosos y que ahora tanto le faltan a Pejiño. Toca empezar la “Operación Recuperar a Pejiño” y evitar esos dobles y triples marcajes que tanto lastran la producción del segundo máximo goleador de Las Palmas, empatado con Viera, y del mejor regateador de su equipo (75 intentos buenos).