Máxima igualdad en El Molinón con las defensas imponiéndose en las áreas

Sporting y Valladolid no pasaron del empate en El Molinón. El partido reflejó la igualdad que existe en la categoría y sobre todo a la hora de buscar un favorito claro en la parte alta de la clasificación. Amath adelantó al equipo pucelano en la primera parte y Cote igualó la contienda tras el descanso.

El resultado se puede considerar justo. Hubo un tiempo para cada equipo. El Valladolid estuvo mejor en el primer período y parecía que podía llevarse el partido, pero el Sporting evitó esa posibilidad con un buen segundo tiempo, hasta que la gasolina se le acabó. Porque el final de partido volvió a ser para los visitantes.

Christian Joel, que no estuvo acertado en el gol, desbarató el remate de Meseguer que pudo significar el 1-2, en el minuto 54, pocos minutos después del empate del Sporting. Fue la mejor oportunidad de los pucelanos, similar a una que tuvo Otero en la primera parte, cuando se presentó solo pero sin fuerza ante Masip y punteó el balón hacia Djuka que no acertó a marcar porque al portero visitante le dio tiempo a tapar la portería y desviar al córner el tiro (20′).

Fueron las mejores oportunidades de un duelo intenso pero con muy pocas ocasiones, con los defensas imponiéndose a los atacantes. El partido estuvo muy igualado. Tanto fue así que dos jugadores fueron los protagonistas en la primera parte: Amath y Otero. Cuando amenazaba uno en un lado, respondía el otro en la portería contraria. Ellos se repartieron las mejores llegadas antes del descanso.

Porque en la segunda parte poco hubo ante las porterías digno de ser anotado. Al margen de la ocasión descrita que protagonizaron Víctor Meseguer y Christian Joel, el resto se quedó en un tiro cruzado de Monchu (49′) y otro alto de Kenedy (83′). Nada más, porque el Sporting, a pesar de su dominio en los primeros 20 minutos de la continuación, no le crearon problemas a Masip.

El partido se consumió sin necesidad de intervención alguna del VAR digna de mención porque las revisiones de jugadas, que las hubo, no pasaron a mayores; es decir, no requirieron de la intervención del árbitro. El Valladolid se marchó con un empate y sigue sin ganar, aunque disfrutó de la ventaja para conseguirlo.

Enfrente tuvo un Sporting que sigue mostrándose fuerte en su campo, a pesar de no lograr la victoria. El dato habla por sí solo: es el cuarto partido que el equipo de Ramírez comienza perdiendo en su campo, pero acaba evitando la derrota.