Luis García: “Vamos a tener que remar hasta con las orejas”

“Me estoy dejando el sueldo en poner velas para que Darder siga”, expresaba Luis García este viernes en el canal de Twitch de Tiempo de Espanyol, en una frase tan vehemente como gráfica. Mucho más institucional, como es lógico, se mostraba en la entrevista que horas después, este sábado a primera hora de la tarde, difundía el club a través de sus canales oficiales.

El espíritu, eso sí, es el mismo. “Si tenemos el grueso de la plantilla, lo único que queda es dar retoques”, afirma el técnico del Espanyol sobre un mercado de verano en el que pide que se imponga la “paciencia”. Igual que en una temporada que puede durar 11 meses, porque el Espanyol no estará ascendido “en diciembre ni en marzo”, en la que el conjunto blanquiazul será “el rival a batir” y, sobre todo, en la que “habrá que remar con remos, con los brazos, con las piernas y hasta con las orejas. Va a ser un camino muy largo”, vaticina.

Ilusiones renovadas

“No pudimos salvar la categoría, pero esa ilusión se multiplica por la confianza en nuestro trabajo, en la forma de ver el juego, por nuestro amor por el club y por tratar de construir un proyecto que devuelva al Espanyol a Primera División”.

Una plantilla mentalmente fuerte

“El equipo está a tope, mentalmente muy fuerte, está trabajando fenomenal. Les ha venido muy bien el descanso de las vacaciones. La temporada pasada fue durísima, este equipo creció a base de golpes muy duros y supo sobreponerse a muchos de ellos, lástima que no pudimos sacarlo adelante. Pero los veo con energías renovadas, con gran responsabilidad, pero sobre todo como un equipo y como un grupo”.

Pretemporada para unirse

“Lo más importante es conjuntar un equipo, empatizar, que los jugadores se conozcan en el campo, estar unidos y saber que todos vamos a luchar por lo mismo”.

Idea de juego

“La idea de todo entrenador va siempre en continua evolución. La mía es ser siempre protagonistas con balón, pero debemos ser un equipo defensivamente fuerte, que conceda pocas situaciones de gol, que no reciba goles porque en Segunda te penaliza”.

Paciencia con el mercado

“Tenemos que darle normalidad al mercado, no ha hecho más que comenzar y todavía falta muchísimo. Debemos estar tranquilos. Lo más importante es que tenemos la base del año pasado, eso es una gran garantía. Está claro que a todo el mundo les encantaría ver caras nuevas, pero la parte positiva es que si tenemos el grueso de la plantilla lo único que queda es dar retoques. Vamos a ver cómo evoluciona el mercado, hay que tener paciencia porque creo que tenemos a gente muy preparada, por supuesto Fran (Garagarza), que me transmite muchísima calma”.

La responsabilidad de un entrenador perico

“Se me pone la piel de gallina sólo con pensar dónde estoy ahora mismo. Tengo una gran responsabilidad, la asumo como tal. Nunca me ha pesado la presión, siempre he tenido la personalidad suficiente para afrontar las situaciones y lo único que quiero es seguir mejorando, ayudar a los jugadores a mejorar, ayudar al club a crecer y construir unas bases para que en unos años podamos decir que el proyecto está funcionando y el Espanyol está donde debe estar con un crecimiento”.

El rival a batir en Segunda

“Todos sabemos inconscientemente que vamos a ser el rival a batir porque nos van a ver muy fuertes. Si somos capaces de empezar fuerte, no digo que metas miedo pero la gente va a decir que el Espanyol va de verdad. El único pero es que el mercado no se cierra hasta tres jornadas después, pero las reglas son para todos iguales y en lugar de buscar excusas debemos buscar soluciones”.

La historia no gana partidos

“El escudo es la leche, la historia también, pero no juegan cada día. Debemos estar muy preparados, saber que es una categoría tremendamente larga. Equipos que han subido perdieron y empataron muchos partidos. Hay momentos muy buenos, otros regulares y espero que pocos malos, pero tenemos que ser conscientes de que es una categoría muy exigente por lo larga que es”.

El papel de la afición

“Lo más importante es que sigan siendo ellos mismos, como hasta ahora. Nos ayudan una barbaridad. Se nota cuando están en el estadio, cuando empujan, pero al final es el equipo el que tiene que dar ese empujón. El estadio sólo necesita una chispa para que arda, nosotros tenemos que darla para que disfruten del año, que vean buen juego y que entre todos consigamos un ascenso y el año que viene estemos en Primera”.

Remar para ascender

“Habrá que remar con remos, con los brazos, con las piernas y hasta con las orejas. Va a ser un camino muy largo. El ascenso no se va a conseguir en diciembre ni en marzo, hay equipos que lo han conseguido a finales de junio tras 11 meses de competición, así que debemos tener paciencia, ser conscientes y sobre todo ser muy insistentes en el trabajo y muy exigentes en el día a día”.