Las cesiones son la vía respiratoria del Andorra

Al Andorra, un recién llegado a Segunda y que jugará en esta categoría por primera vez en su historia, no le está siendo sencillo actuar en el mercado de fichajes profesional. Hasta la fecha, la entidad tricolor solo pudo cerrar la ampliación de la cesión de Marc Aguado, procedente del Zaragoza, una campaña más y no esconden desde la dirección deportiva que esta vía de firmar futbolistas a préstamo es algo que les puede dar mucho oxígeno este curso. La agenda que maneja Jaume Nogués, director deportivo del Andorra, es extensa pero ahí destacan dos futbolistas a los que se seguirá muy de cerca durante sus pretemporadas con sus respectivos equipos. Son Enrique Clemente, del Zaragoza, y, según Mundo Deportivo, Óscar Ureña, del Girona.

Clemente es un futbolista que acumula varios pretendientes en Segunda, pero su juventud, calidad y experiencia en la categoría de plata se adapta perfectamente a lo que pretende Eder Sarabia. El central, de 23 años, ha disputado 59 partidos en Segunda con Real Sociedad B, donde estuvo cedido la pasada campaña, Zaragoza y Logroñés. Fue internacional Sub-21 y las negociaciones están abiertas. En Andorra gusta y se espera que en los próximos días se pueda acelerar y saber si realmente el jugador está por la labor de lucir la camiseta tricolor o no.

Y por otro lado está Ureña. El extremo del Girona hará la pretemporada con el primer equipo y Míchel tendrá la última palabra sobre su futuro. El jugador quiere convencer al técnico y demostrarle que puede tener hueco en Primera, pero también sabe que estar un año con muy pocos minutos, y tras una temporada irregular por culpa de las lesiones, sería ir en contra de su progresión. Por lo tanto, se incorporará a la pretemporada del Girona el próximo día 12 y en semanas se verá más claro su futuro. El Andorra está muy atento a su evolución y desde la entidad rojiblanca se considera que los tricolores, al competir en Segunda, sería una buena salida para Ureña si se decide que debe foguearse lejos de Montilivi. Extremo habilidoso, rápido y sacrificado sería un gran refuerzo para el Andorra. El curso pasado jugó nueve partidos en Segunda con los gerundenses.