La tropa armera se fortalece

El municipio de Eibar late al son de Ipurua y cada vez son más los fieles aficionados que se suman a la causa armera. Tras el triste final del curso pasado, los seguidores se han volcado con el club. Hasta tal punto que superaron el récord histórico de abonados durante este verano. Ahora, con la campaña de abonos aún en marcha, el Eibar redondea la cifra alcanzando los 6.000 abonados por primera vez en sus 82 años de historia. Unos números más llamativos si tenemos en cuenta que suponen cerca de una cuarta parte de los 27.000 habitantes de la ciudad guipuzcoana.

En lo que va de temporada 22-23, Ipurua no ha conseguido presentar su habitual aspecto azulgrana después de tres citas con entradas más bien pobres. Frente al Tenerife poco más de un tercio de espectadores, 3.024, en gran parte debido a la época estival. Ante la Ponferradina la cifra aumentó, aunque no en la medida esperada con 4.480 aficionados, algo más de media entrada. Un dato que creció mínimamente frente al Granada a pesar de las complicaciones del horario programado en lunes. 4.560 eibartarras disfrutaron del contundente 4-0 a los nazaríes. Este domingo a las 18:30, en la visita del Racing de Santander, se espera que se supere la barrera de los 6.000 seguidores en las gradas dado el buen horario y la presencia de unos 800 racinguistas.

De momento el Eibar no ha necesitado del máximo apoyo de su feudo para sacar adelante los tres envites como local. Tres victorias en las que apenas concedió un tanto en la primera jornada cuando se adelantó el Tenerife. Desde ese instante, siete goles locales para un pleno de puntos. Nueve de nueve posibles. Ahora, con una tropa armera más fuerte que nunca, a los de Garitano no les faltará el impulso de las miles de gargantas eibartarras.