La pesada mochila del descenso

La gran mayoría del vestuario del Tenerife ya sabe lo que es descender de categoría. Varios lo han vivido hasta en dos ocasiones. Posiblemente sea el momento más duro en la carrera de un futbolista. Este fin de semana, si se dan una serie de resultados, muchos repetirán, pero unos pocos conocerán esa amarga sensación por primera vez.

Se trata de Sergio González, David Rodríguez, Mellot, Diarra, Aarón Martín, Salvi Carrasco, Teto o Landázuri. Algunos por su juventud y otros porque participaron de proyectos solventes, todavía no se habían topado con esa tristeza que significa despedirse de una categoría superior.

Lo demás volverán a revivir viejos fantasmas. Édgar Badía, por ejemplo, ya descendió con el Elche y con el Reus, equipo que bajó en los despachos por incumplimientos. Adri Guerrero también integraba aquel equipo de la temporada 2018/19.

Yann Bodiger se fue con el Córdoba y el Castellón; Enric Gallego con el Espanyol B y el Huesca, Maikel Mesa con el Osasuna B y Mirandés; Waldo Rubio con Córdoba B y Valladolid; y Juande con el Atlético Malagueño y el Málaga. Con más o menos protagonismo, no pudieron evitar el fatal desenlace.

Con un descenso en su trayectoria están José León (Real Madrid Castilla), Luismi Cruz (Sevilla Atlético), Cantero (Levante), Marlos (Troyes de Francia), Fer Medrano (Atlético de Madrid B), Aitor Sanz (Real Unión), Fabio (Las Palmas) y Jorge Padilla (Atlético Levante).

Párrafo aparte para Ángel Rodríguez quien podría repetir desgracia con la camiseta del Tenerife. Ya le pasó en la campaña 2009/10 con José Luis Oltra siendo esta la única mochila del descenso que carga el lagunero en su larga y exitosa carrera deportiva.

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