La mejor entrada de la era Paulino Rivero

De un tiempo a esta parte, el Rodríguez López ha dado un cambio brutal. No en cuanto a su infraestructura (cuyo proyecto de mejora ya está en marcha), sino a la afluencia de espectadores. Es que desde la llegada de Paulino Rivero, el pasado mes de diciembre, las gradas del estadio se han ido poblando notablemente.

Tanto es así que este pasado fin de semana ante el Levante vieron el partido en el Heliodoro 19.152 aficionados, la mejor entrada con esta nueva junta directiva y por ende, la mejor de temporada 2022/23, mejorando a la del Real Zaragoza de la tercera jornada (18.848).

Es más, desde que Paulino es el máximo mandatario, el Tenerife ha jugado 18 veces en casa y solamente en su primer partido no se alcanzó los diez mil espectadores: fue ante el Andorra, donde hubo 8.750 personas en las gradas. En los demás, siempre se superó dicha cifra.

Mucho tiene que ver también que en la campaña de abonos de este año, se prometió que quien tenga asistencia perfecta a los 21 encuentros de la temporada (o falte a un máximo de dos), no pagará la próxima temporada si el equipo consigue el ascenso. De esta manera, el promedio de afluencia ha subido y ya es de poco más de 15.000 personas.

La última vez que en el Rodríguez López hubo más aficionados que este sábado fue en la final por el ascenso a Primera División ante el Girona, en junio de 2022, cuando se rozó el lleno con 22.082 butacas ocupadas.

“El aficionado se va como nosotros, fastidiados por no sacar los tres puntos pero contentos por cómo se han comportado los jugadores”, confió Garitano tras el partido del sábado no sin agradecer el apoyo que están recibiendo desde el inicio de campaña. “Ellos juegan con nosotros”, repitió más de una vez el técnico vasco.

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