La cuesta arriba de Pejiño
Llamado a ser uno de los pilares de Las Palmas, apenas ha jugado 90 minutos en tres partidos. “Tiene que esperar su oportunidad”, dijo ayer su entrenador.
Con respecto a todos los fichajes que realizó Las Palmas para el presente curso futbolístico, hasta ocho (Park, Enrique Clemente, Sidnei, Vitolo, Álvaro Jiménez, Sandro, Andone y Marc Cardona), siempre se consideró que Pejiño podría ser otro ‘refuerzo’ a tener más que en cuenta. Ocurre que el extremo gaditano, que en todo el tramo de 2022 de la temporada pasada apenas pudo jugar un partido, el que cerró el curso, contra el Sporting, masacrado como estaba por las lesiones y por esa operación de pubis, era esperado con júbilo. Sin embargo, le está costando arrancar.
Igualmente, sus cifras del curso pasado y excelentes registros goleadores, cinco goles en los 14 partidos en los que pudo intervenir, invitaban a pensar en un futbolista capital en la actual Unión Deportiva Las Palmas. Sin embargo, en estas cinco primeras jornadas ligueras, apenas ha jugado 90 minutos divididos en dos partidos, 45 contra el Andorra y 45 contra el Alavés. Para él fueron tres, pues no pudo participar en las dos primeras por aquella sanción que arrastraba del playoff contra el Tenerife, cuando no supo templar sus ánimos tras esa eliminación, descargando su frustración con el trío arbitral. Ese pecado lo está pagando ahora, pues fue la sanción federativa hizo que fuera adelantada en el orden de preferencias para formar el frente de ataque amarillo.
En cualquier caso, cuando ya estuvo disponible para intervenir le tocó quedarse en segunda línea, y contra el Leganés ni siquiera abandonó el banquillo por más que Vitolo o Álvaro Jiménez, competencia suya más que directa, andaran lesionados. “Intuía que el momento de Pejiño iba a ser la segunda del partido. No se dio, creo que Álvaro Lemos hizo un partido muy completo, sabíamos que lo iba a hacer bien. Incluso tuvo la fortuna de meter el gol y la acción que casi supone el segundo gol de Cardona”, justificaba ayer García Pimienta.
Se confirma una tendencia en la que, desde la llegada del entrenador salido de La Masía, la mala suerte es más que protagonista en la vida deportiva de Pejiño: “Cuando llego aquí Pejiño está lesionado y tarda en incorporarse, y cuando lo hace es cuando mejor equipo está el equipo, en la fase final de la temporada pasada, y por lo tanto le cuesta muchísimo entrar, cosa que por un lado es normal porque sale de la lesión y por el otro porque el equipo está muy bien”.
La sanción, además, frenó en seco su inicio de la presente temporada, oportunidad aprovechada por otros compañeros. “La pretemporada la ha hecho perfecta, incluso los partidos de pretemporada se le ha visto bastante bien, pero arrastraba la sanción de la temporada pasado. Creo que sus compañeros lo han hecho bien y tampoco lo veía de inicio para poder jugar 90 minutos”, recordaba su jefe directo.
Santander.
Hoy se montará en el avión junto al resto de sus compañeros con destino a Santander, donde Las Palmas se medirá mañana al Racing, mas solo una sorpresa de última hora impedirá que viva el comienzo del partido desde el banquillo visitante de El Sardinero. “A “Peji” lo veo muy bien, entrenando al 100%. Hay mucha competitividad dentro de la plantilla. Bajo mi punto de vista es un jugador excepcional y que tiene mucho nivel. Como la mayoría de sus compañeros va a tener que esperar su oportunidad e intentar aprovecharla cuando le toque”, insistía Pimienta.
En cualquier caso, el extremo canterano del Sevilla recibió también un sólido empujón para afrontar su particular cuesta arriba. La competencia es, además, feroz (Vitolo, Sandro, Álvaro Jiménez, Moleiro, hasta Lemos y Park). Para él también hay hueco “Cuento perfectamente con él, sé lo que es capaz de darle a este equipo”, le alabó el técnico.