MIRANDÉS

Jofre Carreras y Manu García llegan al Mirandés con la máxima ilusión

Mientras el extremo catalán espera seguir creciendo como jugador rojillo, el medio vitoriano pretende ser uno más y aportar su experiencia al grupo.

Tras el buen sabor de boca que dejó el punto obtenido ante el Sporting en el partido inaugural de la temporada, el Mirandés ha presentado a sus dos últimas incorporaciones que contrastan por la edad. Quince años de diferencia se llevan entre sí Jofre Carreras (21) y Manu García (36), pero ambos llegan con la máxima ilusión al conjunto jabato.

El extremo catalán espera olvidar la grave lesión que frenó en seco su evolución sobre el césped, cuando defendía la camiseta del Espanyol B. “Como se ha visto en estos años, el Mirandés es un club que trabaja muy bien con los jóvenes. Es un buen sitio para crecer y tener minutos. Me encuentro bien físicamente y si el míster decide que tenga que jugar este fin de semana, yo estoy preparado”, apunta.

Se define a sí mismo con un futbolista desequilibrante que puede actuar en cualquier posición de ataque, incluso como segundo delantero: “Busco el uno contra uno y soy rápido. También puedo aportar algún que otro gol y asistencias. En el primer partido, vi a un equipo que quiere jugar y va hacia arriba, que es intenso y constante. Me gusta mucho esa idea. Todos los jóvenes tenemos hambre de crecer y estar más arriba al año que viene”.

Manu García, la figura paterna de un bisoño vestuario

Por su parte, el veterano centrocampista alavés afronta el reto como una nueva oportunidad para seguir aprendiendo y disfrutando del fútbol. “Sé que el proyecto se está nutriendo de gente muy joven, pero no me da miedo esta situación. Me veo como parte del grupo, como uno más. Siento la necesidad del día a día, de tener exigencia y competencia. Barajando las diferentes opciones que tenía, finalmente decidimos que la que más cumplía las expectativas era la del Mirandés”, afirma.

Manu García luchará por hacerse con un puesto en el once titular, además de ejercer casi como un padre en el joven vestuario mirandesista: “He sido muy exigente conmigo mismo y siempre he querido dar lo mejor de mí. Quiero ponerme rápido al nivel de mis compañeros. Sé que me ayudarán a tener una exigencia alta que es lo que buscaba. Evidentemente mi idea es jugar lo máximo posible. Pretendo ser uno más y ayudar con mi experiencia. Tácticamente he evolucionado mucho en los últimos años e intentaré aconsejar en ese sentido”.

El jugador vitoriano es un icono en su ciudad tras su periplo en el Deportivo Alavés con el que logró dos históricos ascensos. El destino y el propio calendario han sido caprichosos y Manu García podría debutar como rojillo en un estadio que le idolatra y que le rendirá una calurosa ovación: “Será muy especial para mí. No me podía imaginar que mi primera vuelta a Mendizorroza fuese como jugador del equipo rival. El fútbol es caprichoso. Supongo que los momentos previos serán extraños y especiales, pero luego trataré de disfrutarlo. Ojala consigamos hacer un buen partido y sumar que sería muy importante”, destaca.

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