García Osuna, condenado a dos años de prisión y a pagar 120.000 euros

El juzgado de instrucción número 2 de Castellón ha dictado condena contra el ex máximo accionista del C.D.Castellón, José Manuel García Osuna, quien ha sido sentenciado a dos años de prisión y a abonar 120.720 euros como responsabilidad subsidiaria hacia la entidad deportiva. Esta resolución se produce después de que García Osuna decidiera no aceptar la propuesta de acuerdo presentada por el CD Castellón antes del juicio.García Osuna ha sido declarado autor penalmente responsable de un delito continuado de falsedad en documento mercantil en concurso medial con otro delito continuado de apropiación indebida. Esta decisión judicial llega tras una larga serie de investigaciones que han puesto de manifiestas irregularidades en la gestión económica de la entidad.

Sin embargo, la falta de antecedentes penales del ex máximo accionista del CD Castellón podría permitirle eludir el ingreso inmediato en prisión, lo que ha suscitado críticas por parte de algunos sectores de la opinión pública que esperaban sanciones más severas.

La cifra a devolver, 120.720 euros, se sumará a la considerable cantidad de 1,1 millones de euros que deberán pagar otros seis acusados que optaron por declararse culpables antes del inicio del juicio. Estos procesados, entre los que se incluyen nombres como Antonio Blasco, Miguel Ángel Ludeña y Fernando Giner, admitieron su responsabilidad en delitos relacionados con la falsedad en documento mercantil, apropiación indebida y administración desleal. Un punto notable de esta sentencia es la absolución de Álvaro Rodríguez Hesles, quien, tras el juicio, vio cómo se retiraba la acusación en su contra.

La reacción ante la sentencia ha sido variada. El presidente del CD Castellón, Haralabos Voulgaris, ha expresado su satisfacción por los acuerdos alcanzados con algunos de los procesados, considerando que “parece un buen trato teniendo en cuenta la sentencia final”. Esta resolución judicial contrasta notablemente con la posición inicial de la Fiscalía, que había solicitado penas que sumaban más de nueve años de prisión para García Osuna, así como una responsabilidad civil de seis millones de euros.

El capital obtenido de la indemnización del caso Castellnou será destinado por el club a proyectos de infraestructura clave, específicamente la adquisición de terrenos y el desarrollo de una nueva ciudad deportiva. Con todo, la sentencia del Caso Castellnou marca un hito importante no solo para el CD Castellón, sino también para el deporte profesional, al subrayar la importancia de la transparencia y la ética en la gestión de las entidades deportivas. La reflexión sobre este caso ofrece también lecciones valiosas para otros clubes en el país que buscan prevenir situaciones similares en el futuro.

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