El Sanse desangra Riazor y acaba con su gafe a domicilio

El Deportivo repetía en Riazor sólo una semana después de su inapelable derrota ante el Castellón con la misión de recuperar la solidez y de paso darle un mordisco a la pelea por el liderato tras el tropezón en casa del Racing ante el Leganés. Y lo que se llevó fue una soberana bofetada, un golpe total al sufrir su segunda derrota consecutiva en su estadio y, como la primera, sin parches ni paliativos. Un 0-3 de los que duelen y desangran a un equipo que quiere pelear por el ascenso directo y que de pronto ha entrado en la penumbra. Pero no sería justo mirar sólo al negro, también hay que hacerlo al blanco. A una Real Sociedad B que supo sufrir cuando tocaba y que golpeó como un martillo para abandonar su gafe a domicilio por la puerta grande. Gran victoria, fuera del descenso y honores para Carrera, Gorosabel, el infranqueable Aitor Fraga y un Balda que culminó su recital con un golazo de bandera.

La fresquita noche coruñesa, que acabaría helando Riazor, comenzó con un Yeremay caliente, que forzó una amarilla a los 47 segundos y que tuvo el gol a los siete minutos, pero después de regatear a Aitor Fraga su remate a puerta vacía se marchó ligeramente cruzado. Salida en tromba del Depor, intenso en la recuperación y peligroso con las entradas por las dos bandas con el canario y David Mella. Poco a poco la Real fue mejorando en la ocupación de espacios y bajando el ritmo al duelo, aunque con muchas dificultades para generar peligro. Balanza más equilibrada y primer arreón local superado por el conjunto txuri-urdin.

El equilibrio fue tornando poco a poco en problemas para los de Hidalgo. Problemas a la hora de sacar el balón y controlar el ritmo, pero también primeros avisos sobre los dominios de Germán Parreño. Las sensaciones se convirtieron en premio para el filial donostiarra pasada la media hora. Primero Aitor Fraga realizó una gran parada tras una peinada casi a bocajarro de Soriano a centro de Mella. Acto seguido Patiño, en un error catedralicio, regaló una contra que Carrera, tras un gran pase filtrado de Astiazaran, saboreó como un caramelo para marcar el 0-1 y dejar helado a Riazor.

La misión de los coruñeses en el segundo acto era remontar y para ello Hidalgo apostó por los mismos mimbres. Como en el primer tiempo, el Depor salió con fuerza, se hizo con el balón y comenzó a generar peligro. Pero como al inicio, el efecto fue gaseosa con el problema añadido de los nervios por el marcador. Atasco blanquiazul que empezó a despejar el recién entrado Eddahchouri intentando despertar a su tropa. Y lo hizo, primero lo intentó Mella y luego Quagliata, pero de nuevo se toparon con un Aitor Fraga enorme. Y para repetir el guion, fueron los de Ansotegi los que golpearon. Esta vez fue Balda de un enorme disparo desde 30 metros para poner el broche de oro a su partido. Dura herida que seguiría sangrando con la puntilla, con el gol de Gorosabel que ponía el tercero, uno por cada uno de los tres primeros puntos que sumaban los donostiarras fuera de casa.

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