El Oviedo domina y acierta

El Oviedo sigue de dulce, ya son 14 puntos de los últimos 18 en juego. Suma cuando juega bien, cuando lo hace regular y cuando todo cuesta un mundo. El choque ante el Alcorcón tuvo bastante de lo último, pero acabó como la mayoría de los dirigidos por Carrión: triunfo de los azules que, en medio de espléndida racha, ya están en mitad de la tabla. Los goles de Seoane y Camarasa sirvieron para tumbar a un defensivo Alcorcón.

Los dos contendientes cumplieron desde el primer minuto con su roles. El de los azules, manosear el balón. El de los visitantes, entregarlo y esperar las contras. La tela de araña tejida por los de Fran Fernández se les atascó a los locales, a pesar de que la presencia de Santi Cazorla en el doble pivote, primera titularidad de la temporada la suya, prometía soluciones ingeniosas.

Tardó el Oviedo en carburar y el Alcor trató de sacar tajada a la contra. Addai fue el primero en visitar a Leo Román. Luego lo hizo Iago, desde lejos. Entre medias, Bretones centró ya en el área, tras un gran servicio al espacio de Colombatto, pero Jesús defendió ágil.

Sí fue claramente azul el último tramo del primer tiempo. Primero fue Moyano el que casi encuentra el gol tras un pase entre líneas que solo podía imaginar Cazorla. Se quedó cerca. El premio sería para Seoane, inadvertido hasta entonces. Centró Colombatto en la última acción del primer tiempo. Lo hizo tan cerrado, que la pelota, sin que la tocara nadie, chocó con el palo. Seoane acompañaba desde cerca y se hizo con el rechace para anotar y, de paso, darle un empujón anímico a los suyos tras un primer acto demasiado trabado.

Siguió insistiendo el Oviedo tras el descanso. Mandando en campo rival. Y tratando de hacer daño con el balón parado. Colombatto remató un poco arriba un córner abierto. Carrión relevó a los 60 minutos a Cazorla, convincente partido el suyo, e introdujo a Camarasa.

Como el Alcorcón terminó por adelantar filas, el Oviedo sufrió algo más, pero también encontró más huecos para hacer daño al visitante. En una de estas ocasiones, Masca, recién ingresado, recibió con mimo de Colombatto, pero su disparo fue repelido por un inspirado Jesús Ruiz.

Sentencia solo al final

El Alcorcón sí se lanzó a por empate en el último tramo del choque. Queda la duda de qué hubiera pasado si lo hubiera probado antes. Quizás no le daba al equipo de Fran Fernández, que atraviesa un periodo de dudas, lo contrario que su rival. Por eso, el Oviedo acertó con la siguiente que tuvo, el que finiquitaba el partido.

Centró Colombatto un balón medido y Camarasa emergió en el palo más alejado para cabecear a la red. Gozoso regalo tras su regreso progresivo a los campos. Otro motivo para la celebración de los azules, que siguen mirando hacia arriba.