El método de Calero para la vuelta a la competición

El Levante, en el plano deportivo, ha tenido que adaptar su hoja de ruta por las consecuencias de la DANA. Los partidos frente al Pontevedra, de Copa del Rey, Málaga y Tenerife se fueron aplazando paulatinamente por los acontecimientos, por lo que a Julián Calero y a su cuerpo técnico no les ha quedado más remedio que ir improvisando el plan de trabajo con el paso de los días. “Un cuerpo técnico y la gente que lidera, en general, tiene que adaptarse a todo. Tienes que tener flexibilidad porque pasan muchas cosas durante la temporada. Hay situaciones puntuales en las que te tienes que ir adaptando, ser flexible, y liderar desde el conocimiento y la experiencia. Se han dado estas circunstancias, que eran imprevistas, y ahora tenemos tres partidos aplazados”, cuenta el entrenador del Levante para AS.

En ese sentido, Calero se ha regido por unas siglas: “Nosotros le llamamos de una forma: SLM. Que significa sobre la marcha. No nos ha quedado más remedio que ir adaptándonos a las circunstancias. Por ejemplo, íbamos preparando el partido de Copa y a última hora se suspendió. Lo intuíamos, pero nosotros teníamos que tenerlo preparado. Luego fuimos preparando el partido del Málaga o el de Tenerife, pero también se aplazaron y nos hemos ido adaptando”, detalla el técnico de Parla.

Calero, con el regreso a la competición este sábado frente al Elche en el Ciutat de València tras 19 días sin disputar un partido oficial, es consciente de que están en ligera desventaja porque el equipo ha perdido en cierta manera el ritmo competitivo. Sin embargo, espera que la situación se compense con el compromiso y la ilusión de sus jugadores por volver a competir y dar una alegría a la gente, pese a que los detalles forman parte de las preocupaciones de un entrenador.

Para preparar la vuelta al terreno de juego, Calero y los suyos han apostado por aumentar la carga, con los GPS marcando parámetros cercanos a los del día de partido, e incluso planteando un encuentro de once contra once en el estadio para finalizar los entrenamientos de la semana pasada. “Hemos entrenando a un nivel de intensidad alto, muy alto diría yo, para intentar compensar. Lo que falta, evidentemente, es el escenario de la competición”, matiza Calero.

Este improvisado parón ha servido para ir recuperando efectivos en una plantilla plagada de bajas. Durante estos días, jugadores como Diego Pampín y Ángel Algobia han vuelto a ejercitarse con el grupo y están a disposición del míster de cara al encuentro del sábado en Orriols. La baja confirmada, eso sí, más allá de los jugadores que permanecen en la enfermería, es la del internacional Giorgi Kochorashvili, concentrado con la selección de Georgia.

Ahora, con los entrenamientos de vuelta en Buñol tras solventar en parte los problemas que se produjeron en la Ciudad Deportiva por las fuertes lluvias, al menos para que el primer equipo recuperara su espacio de trabajo, todo ha vuelto a una cierta normalidad. El equipo se ejercita esta semana de principio a fin con la certeza de que el fútbol regresa a la ciudad de Valencia, en un encuentro que es mucho más que fútbol.

“Es muy importante para nosotros volver a jugar en el Ciutat. Esperemos estar arropados y que se llene el estadio. Es la mejor medicina. Si tenemos que llorar en el minuto de silencio, lo haremos juntos y de la mano. Si luego hay que celebrar algo, lo haremos con la prudencia que merece y dedicándoselo a los que ya no están o han perdido algo en esta tragedia. Esa es la mejor forma que vamos a tener para poder homenajear a los damnificados”, asegura Calero, que matiza que “el dolor y el daño siguen ahí, y siempre estarán; no lo olvidaremos, pero hay que continuar”.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.