El Málaga de Pellicer no mejora al de Pepe Mel

El Málaga no levanta cabeza. No ha sido capaz de encadenar dos victorias seguidas en toda la temporada. Su último traspié en Andorra confirmó que el equipo está para muy poco a pesar de los resultados precedentes y de la corriente de ilusión que se generó en el vestuario y en la grada tras imponerse al Leganés. Quitando el duelo de este último fin de semana, las sensaciones futbolísticas habían sido mejores y el equipo ofrecía mayor solvencia y seguridad.

El técnico de Nules heredó un proyecto en unas condiciones calamitosas y su grado de responsabilidad es limitado. Sin embargo, los números no engañan y también evidencian que Pellicer no está siendo la solución deseada por el club cuando destituyó a Pepe Mel y le entregó el timón. De hecho, los resultados del actual entrenador no son nada buenos y están incluso por debajo de los promedios que le costaron el cargo a Pepe Mel.

El madrileño sumó 18 puntos en las 18 jornadas que dirigió al Málaga, un bagaje del todo insuficiente. Una media de descenso que le acabó costando el puesto. En estos momentos, Pellicer acumula diez partidos al frente del Málaga en los que ha sumado nueve puntos, ni siquiera uno por encuentro (0,9). Extrapolando la comparación a los diez primeros partidos de uno y otro técnico, el balance es algo favorable a Pellicer (nueve puntos por ocho sumados por Mel en sus primeras diez citas).

Con estas cifras se antoja una quimera pensar en las opciones de permanencia de un Málaga que sólo ha ganado seis partidos de los 34 que se llevan disputados en el campeonato. La salvación exige ganar al menos seis de los últimos ocho partidos. El Málaga necesita algo más que un milagro para continuar en el fútbol profesional.