El Leganés se aferra a su fuerza visitante para recuperar rumbo
El líder engarzará dos salidas (Elda y Albacete) complejas. Aún así, la fortaleza del equipo fuera de Butarque invita al optimismo. Es, con mucho, el mejor equipo fuera de su hogar.
Camina el Leganés por cierta senda de incertidumbre. Los pepineros encadenan cinco partidos seguidos sin ganar (todos empates, de ellos, cuatro a cero) que, resultados de los rivales mediante, han apretado la zona del ascenso directo y evaporado la percepción de suficiencia con la que se habían aferrado al liderato.
Pese a engarzar 26 jornadas seguidas en lo más alto, los blanquiazules observan el futuro con la incertidumbre de quién sabe que todo puede pasar. Desde el ascenso directo, hasta quedar fuera de los playoff. Pura Segunda División. El reto de los de Borja Jiménez es recuperar la excelencia en los resultados y la regularidad como rutina para conseguirlos. Una mezcla que, paradojas del fútbol, el equipo ha hallado fuera de casa y no en Butarque. Bueno para el Leganés.
Salidas difíciles, aire optimista
Al menos sobre el papel, claro. Porque de estas cinco jornadas que restan para que se acabe el campeonato, tres las disputarán allende su hogar y dos serán, además, seguidas como forastero. Los madrileños tendrán que visitar en los próximos días dos estadios del anillo infernal, esto es, de esos equipos que bordean fronteras de azufre con amenaza de descenso. Primero será Elda. Después, Albacete. Retos complejos ante los que el líder ansía desplegará números rotundos.
Fuera de casa, este equipo es potente como ninguno en la categoría. El mejor visitante, con 29 puntos en su haber tras haber disputado 18 jornadas fuera de casa. Curioso: le saca cinco puntos al segundo mejor visitante, el Eibar, pese a haber disputado un partido menos fuera de su estadio. Los armeros ya han jugado 19 veces fuera de Ipurua. El Lega, 18. Y aún así, la distancia es grande. También en la letra pequeña.
El blindaje como clave
En el reparto de partidos, ocho victorias en casa ajena, cinco empates y cinco derrotas. Por resumirlo en un titular, el Leganés es el equipo que más vence fuera de su estadio y el que menos veces ha perdido. También el que maneja una mejor diferencia de goles, con un +7 fruto de que, aunque no golea tanto como otros (19 tantos, por detrás de Eibar o Espanyol), apenas le marcan.
Los 12 goles que ha recibido allende Leganés son el guarismo más bajo de un visitante con diferencia. Le sigue el Huesca (13 tantos en contra fuera de casa) y después, un abismo. Ninguno de los otros cuatro mejores visitantes ha encajado menos de 20 goles de visitante.
Bajón en Butarque
Cifras de esperanza que, en contraste, mutan en Butarque, donde este Lega ha perdido poco (sólo dos derrotas), pero no ha ganado mucho. Sólo ocho encuentros de 19. El resto han sido empates (8). Guarismos que hacen del Leganés un local de la zona media. Con solo los partidos disputados en casa, los madrileños serían 9º, a ocho puntos del mejor local, que es el Valladolid (43 puntos, como el Burgos).
Así que el mantra de aferrarse al fortín local para conseguir los objetivos, en el caso del Leganés, es menos mantra. Los de Borja Jiménez están siendo más heterodoxos para cumplir el objetivo del ascenso, ése que, sí o sí, pasará más por lo que suceda fuera de su casa, que en Butarque.
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