El efecto Ferran Costa se queda en nada
Tras el adiós de Eder Sarabia, el Andorra logró dos victorias. Ahora encadena cuatro partidos sin ganar (dos derrotas y dos empates) y sigue colista.
La reacción que mostró el Andorra tras la destitución de Eder Sarabia se ha diluido del todo. Los triunfos ante Mirandés y Eldense se han visto neutralizados por las cuatro jornadas que se acumulan sin ganar (dos empates -Espanyol y Racing de Santander- y dos derrotas -Eibar y Albacete-) y es un hecho: el efecto Ferran Costa se ha quedado en nada. La llegada del técnico sí ha provocado que el equipo tricolor se muestre más competitivo, pero sigue cometiendo errores graves en las áreas. Sin ir más lejos, el pasado domingo cayó ante el Albacete (0-1) tras mostrarse inoperante en ataque y endeble atrás. Juanma, con su tanto en el minuto 84, les condenó.
Se acaba el tiempo y es que tan solo quedan 12 puntos por disputarse. La permanencia, que la vislumbran a cinco puntos de distancia, empieza a ser una cuestión de fe porque las sensaciones que desprende el bloque tricolor no son buenas. Los triunfos no llegan y es lo único que hará que se logre la salvación. La plantilla sigue confiando, pero la derrota contra el Albacete fue un golpe muy duro. Tras empatar ante el Racing de Santander en el Estadi Nacional, el equipo tenía una nueva oportunidad en casa de resurgir y la desaprovechó. De ahí que tras el duelo, los jugadores no lograran separar la mirada del suelo cuando abandonaron el estadio.
Sumar solo dos puntos de los últimos 12 ha colocado más piedras en una mochila que empieza a ser demasiado pesada. Al Andorra le restan cuatro encuentros y el calendario no es sencillo porque se enfrentará a cuatro equipos que están en plena lucha por el playoff como Sporting y Oviedo, a domicilio, y Burgos y Racing de Ferrol, en casa. El momento que pasa el conjunto del Principado es complicado, aunque toca afrontarlo como viene. Martí Vilà, que fue una de las notas positivas contra el Albacete por su reaparición sobre el terreno de juego (no jugaba desde el 16 de diciembre de 2023), así lo explicó: “Quedan 12 y estamos a cinco puntos. Creo que estamos vivos y la clave es que debemos ser estables. Ahora tendremos que ir a El Molinón a ganar y lo daremos todo. La derrota ante el Albacete fue un golpe muy duro porque teníamos muchas ganas y esperanzas, pero hemos de seguir trabajando, ser autocríticos y mejorar”.
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