El Castellón apuesta al nueve

El Castellón sobrevivió las primeras semanas de competición sin la aportación destacada de sus tres nueves. Solo Camara fue capaz de ver portería precisamente en la primera jornada frente al Racing de Santander. Desde entonces el equipo albinegro, primero entrenado por Johan Plat y posteriormente por Pablo Hernández, tuvo que esperar hasta la jornada ocho para que alguno de sus tres nueves, volviera a ver portería.

Cierto es que Jakobsen llegó al cierre del mercado y no debutó hasta la jornada cuatro, pero ha tenido que esperar cinco jornadas para marcar.

La falta de pegada de los hombres punta del equipo avivaron el debate sobre la calidad de los futbolistas que ocupan dicha demarcación. Los números en el arranque de temporada sumados a los que se arrastraban desde la pasada campaña no ayudaban a rebajar el pesar de la opinión pública.

Sin embargo la defensa por parte del su máximo valedor, Bob Voulgaris, fue contundente. En los peores momentos efectivos de sus delanteros, el presidente los defendió a capa y espada, y dicha defensa parece que ahora empieza a dar sus frutos.

Precisamente en la última jornada ante el Sporting, mojaron los dos nueves del Castellón. Jakobsen abrió el marcador y Camara lo cerró para marcar el 3-1 defintivo.

Con estos tantos, los nueves aportan tres de los trece goles que suma el equipo, una cantidad todavía lejana a lo que un delantero centro debería ofrecer en el Castellón.

Sin embargo la apuesta de Voulgaris es clara. Jakobsen fue capaz de anotar un gol cada tres partidos en el Frederica, misma media que en el Frem y en el Brommapojkarna, y a eso aspira en el Castellón. Media que mejoró incluso Camara en el Auxerre B y en el Annecy, donde logró anotar un gol cada dos partidos. Ambos no han llegado a ese nivel en el Castellón pero aspiran a ello.

Por su parte Markanich llegó al Castellón tras ser capaz de anotar un gol cada dos partidos en el Charlestone de la segunda división de Estados Unidos, cifra muy lejana a la que ha logrado sumar hasta la fecha en el equipo albinegro (un gol cada ocho partidos), aunque en su defensa cabe decir que pocos minutos ha disfrutado en partido completo. Si dividimos gol por 90 minutos, Markanich, saca una media de un tanto cada tres partidos, mejorando incluso a Jakobsen y Camara. El debate está servido, pero la apuesta de Voulgaris es clara, apuesta al nueve albinegro.

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