El banquillo de la Ponferradina también suma
Los tres últimos goles de la Deportiva, que han valido cuatro puntos, los anotaron jugadores suplentes.
Aunque ha tardado más de lo deseado, el discurso que ha mantenido David Gallego desde su llegada a Ponferrada empieza a dar los frutos que quería el técnico catalán. Si el primer paso era ganar en consistencia defensiva, algo que se empezó a ver casi desde el primer día, en las últimas jornadas están saliendo a relucir otras facetas a las que el entrenador da suma importancia para competir con éxito en Segunda División.
Así, Gallego ha insistido casi en cada rueda de prensa en la importancia de los jugadores que salen desde el banquillo, llegando incluso a afirmar que al once inicial se le da demasiado bombo y que los que acaban el partido son tan o más necesarios que los que empiezan.
Su equipo le ha dado la razón al entrenador en las últimas jornadas, en las que los tres goles anotados por la Deportiva, que han servido para sumar cuatro puntos ante Granada y Alavés, fueron anotados por jugadores que salieron desde el banquillo. Pascanu y Yuri le dieron la vuelta al marcador en Los Cármenes, aunque el postrero gol del Granada impidiera la victoria final, mientras que Hugo Vallejo hizo el gol de la victoria frente al Alavés cuando llevaba apenas seis minutos en el césped.
Esta importancia de la segunda unidad de la Ponferradina le da un nuevo brote verde al que aferrarse al equipo berciano, que hasta el partido contra el Granada sólo había sumado tres goles de sus suplentes: uno de Yuri ante el Mirandés que no dio puntos, otro de Derik en el empate ante el Tenerife en la jornada 7 y el de Edu Espiau que sirvió para ganar en Albacete en la ya lejana sexta jornada.