El balón parado vuelve a hundir al Oviedo

Nuevo entrenador y mismos malos de siempre. El Oviedo parecía reaccionar en el Mini Estadi cuando se puso 0-1 en el marcador gracias a un cabezazo tras un córner de Obeng. Acababa además el equipo con su sequía a balón parado, estrenando su cuenta de tantos de córner. Pero la condena también llegaría desde la esquina. Dos saques desde el ángulo mostraron los males de los azules y condenaron al equipo a otra derrota, al segunda seguida, que vuelve a meter al Oviedo en problemas.

Regresa el equipo de Cervera a los puestos de descenso con la sensación de que al entrenador aún le queda mucho por remar. Las bajas condicionan su trabajo en el día a día de El Requexón pero el técnico no pone excusas. Sabe que ahora lo que toca es sumar como sea para salir de abajo.

Los dos goles del Villarreal B llegaron en saques de esquina. En el primero, el del empate, Mbacke logra escapar de la marca de Tarín para rematar solo en el área pequeña. Tomeu Nadal repele pero Arana está más atento que los defensores azules para empujar a la red. No pareció el Oviedo poder recuperarse del golpe ya que el equipo pareció desconcertado desde entonces.

Sin embargo, Obeng tuvo el 1-2 en una jugada en la que falló en la definición. Y en el último suspiro llegó la condena. Otra vez en el añadido. Otra vez en una jugada de estrategia. En esta ocasión, el filial amarillo sacó un córner en corto y, tras una sucesión de pases, envío al área. Mbacke remató sin oposición después de que un compañero hubiera ganado el balón en el primer duelo. La triste realidad del Oviedo a balón parado mantiene al equipo en la cola de Segunda, sin lograr sacar la cabeza de una vez por todas.

Ahora, el Oviedo recibe el domingo al Granada en el Carlos Tartiere, en una cita que pasa a convertirse en una batalla por la supervivencia. Aún queda mucho campeonato, pero el equipo debe empezar a sumar de tres en tres si no quiere que los problemas le rodeen en una campaña que se encaró con ilusión y que va camino de ser una pesadilla.

Cervera, crítico.

Álvaro Cervera lamentó tras el choque de Villarreal la oportunidad perdida por sus pupilos para escapar de la zona de problemas. Lamentó especialmente el técnico la endeblez de los suyos en las acciones a balón parado. “Estoy contento con alguna cosa que veo en el campo, pero esto no se trata de estar contento, sino de sacar puntos. Solo de eso. Y no los logramos sacar. Cuando una cosa se repite no es por casualidad: desde que estoy aquí nos han metido tres goles de saques de esquina. El balón parado es difícil entrenarlo, pero son más cosas: concentración, solidaridad...”, explicó Cervera tras el choque,

“En La primera parte pudimos irnos con ventaja por las oportunidades que creamos y no lo conseguimos. La segunda sí fue más disputada, no hubo muchas ocasiones claras: solo se llegó a través de balones parados. Se ha jugado como esperamos, no nos hicieron peligro, pero volvemos al balón parado… No es normal: son errores de concentración, de jugadores”, añadió el entrenado de los azules.