Dani Gómez alimenta el sueño con una remontada para el recuerdo

En pleno Domingo de Ramos, el Levante se aferró a un golpe de fe para agarrarse a sus aspiraciones por tratar de asomar la cabeza en los puestos de playoff. Tras ir cayendo por dos goles, firmados por Tete Morente y Mario Gaspar, y un dominio absoluto del Elche en el primer tiempo, un penalti cambió por completo el rumbo del encuentro. Dela tomó la responsabilidad desde los once metros y Brugué encarnó el espíritu de la remontada, marcando el tanto del empate y asistiendo con un sublime taconazo a Dani Gómez para llevar al éxtasis al Ciutat de València en el tiempo de descuento. Tres puntos que alimentan el sueño de afrontar las últimas diez jornadas con la ambición de pelear por el ascenso, cuando parecía imposible tras ver a un Levante gris en los primeros 45 minutos del encuentro. Como dice la canción de Los Secretos, un himno en la grada granota, el Levante ha muerto y ha resucitado.

El Elche hizo suyo el primer tiempo, acumulando la posesión y las ocasiones más claras. Tete Morente, que tuvo la primera clara, pero se equivocó en el control y al intentar picarla por encima de Andrés Fernández, abrió el marcador en Orriols. Nico Castro filtró un balón a la carrera de Arnau Puigmal que la puso con música dentro del área para y Tete Morente se impuso de cabeza en el duelo con el joven Xavi Grande para romper una racha de cinco partidos sin encajar en el Ciutat de València. Más tarde, John tuvo la opción de hacer el segundo de no ser por el instinto defensivo de Dela dentro del área chica y Rodrigo Mendoza tuvo hasta dos opciones topándose con Andrés. En el equipo local, tan solo Fabrício trataba de hacer la guerra por su cuenta y poco más.

Con otro espíritu salió el Levante en el comienzo del segundo acto, pero tan solo fue un oasis en medio del desierto. Fabrício robó en tres cuartos y probó fortuna con un disparo cruzado que se marchó por poco. Pero pronto llegó el golpe de realidad. Beccacece introdujo un ligero cambio al descanso, dando entrada a Bermejo por Mendoza y adelantado la posición de Mario Gaspar, con John dando un paso atrás en la línea de centrales. Arnau Puigmal botó un balón desde el córner, una pesadilla para los granotas en los últimos partidos, y Mario fue el más listo de la cale adelantándose en el primer palo para hacer el segundo de la tarde para el Elche. Tras el gol, el ex del Villarreal intercambiaba constantemente su posición con John en el, por momentos, indescifrable dibujo de Beccacece.

La respuesta de Felipe llegó mediante los cambios. Bouldini e Iván Romero dejaron su lugar a Andrés García y a Lozano. La fortuna llegó con un inoportuno penalti de Josan para cortar la subida de Álex Muñoz y Dela, central, tomó la suerte desde los once metros con acierto para despertar al Levante de su letargo. Un gol que valió para cambiar el escenario del partido, levantando a un Ciutat sumido en protestas contra la nueva directiva en el primer acto y que quiso jugar su papel para tratar de darle la vuelta al marcador.

Lo cierto es que los levantinistas se lo creyeron y un balón al espacio de Pablo Martínez lo aprovechó Brugué para empatar el encuentro metiendo el balón por debajo de las piernas de Dituro. Bigas, que trató de sacar el balón sobre la línea, acabó destrozado con el palo y solicitando el cambio por un duro impacto en la cadera. Con la grada de Orriols volcada, la inercia del partido fue de lado de los granotas y en el tiempo de descuento, tras una ocasión clara de Mourad que se marchó por nada, Dani Gómez reventó el partido nada más entrar culminando una remontada para el recuerdo. El propio Dani ganó un balón en el centro del campo que cayó en las botas de Brugui, renacido con Miñambres, y que con un taconazo asistió al delantero madrileño para llevar al éxtasis al Ciutat de València.