Cuestión central: la gran decisión del ‘Cuco’

Ziganda afrontará el lunes a su primera gran decisión técnica en su breve mandato como entrenador de la Cultural. Más allá del resultado, el estreno en partido oficial dejó como sello un eficiente rendimiento a nivel defensivo ante un rival, el Real Valladolid, que obligó a los leoneses a defender mucho tiempo cerca de su portería. El balance (Badía apenas fue exigido) ensalzó la labor de Rodri y Tomás Ribeiro, dos colosos en territorio enemigo. Esta pareja gana enteros para repetir, con el permiso de Matía Barzic, indiscutible unas semanas antes. Con el central madrileño ya recuperado de sus dolencias físicas, llega la ahora del ‘Cuco’.

Con la llegada fuera de plazo de Ribeiro, quien más y quien menos apostaba por un tándem con Barzic, erigido en líder defensivo tras un convincente comienzo de liga, pero desbancar a Rodri son palabras mayores en la actualidad. El canterano se ha ganado el puesto y su continuidad en el once titular ofrece pocas dudas. Además, han sido varios los guiños públicos de su entrenador, que se apoyó mucho en el capitán, y leonés, a la hora de preparar el duelo en Valladolid desde el punto de vista emocional. Después de su exhibición defensiva, Rodri plantó su bandera confirmándose de nuevo a ojos de los escépticos.

Tres días, eso es lo que tendrá Ziganda para elegir el tándem con el que hacer frente a uno de los mejores ataques de la competición, el Albacete, que llegará al Reino espoleado por su espectacular remontada en El Molinón. Exigirá mucho a la Cultural a nivel defensivo. Por ello, la elección de jugadores resultará clave. Rodri es ya un fijo, Tomás le da al equipo una salida de balón única desde el perfil izquierdo y Barzic mezcla virtudes de sus compañeros.

El factor físico apunta a ser determinante. Si el portugués sigue elevando las cargas en el día a día para estar pronto al cien por cien, el jugador cedido por el Elche sale de lesión, razón por la que se perdió los últimos choques. No jugó ante el Castellón, y el efecto fue demoledor, y en el duelo autonómico jugó los minutos finales como lateral y forzado por las circunstancias físicas que rodearon a su equipo, pero ya antes algunos partidos se le hicieron cuesta arriba llegando al pitido final con evidentes síntomas de fatiga muscular.

A la espera de una decisión que se antoja capital en el aspecto defensivo, Ziganda respira tranquilo sabedor de poder contar con tres opciones altamente fiables, a pesar de que las bajas de Fornos y Satrústegui reducen al máximo el número de defensas centrales. Ambos causarán baja una jornada más y continúan formando parte de una enfermería que están a punto de abandonar Mboula y Maestre.

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