Calleja: “Como entrenador se sufre mucho más de lo que se disfruta”

El lado más personal de Javier Calleja. El técnico del Levante se abrió en canal en una extensa entrevista de SER Deportivos Valencia, repasando su trayectoria en Orriols, desde su llegada al batacazo del no ascenso. “Sin duda, pero con mucha diferencia” el palo más duro de su carrera. Aderezada por una canción cargada de simbolismo, ‘He vuelto’ de El Barrio (no es casualidad que sea una de sus favoritas), el técnico granota reflexiona con que “siempre hay que reinventarse, intentar pasar página tanto de lo bueno como de lo malo y mirar al futuro con ilusión y ganas” mostrando además “al verdadero Javier Calleja, el que no se ve detrás de las cámaras”. Ese que se considera “el hombre más afortunado del mundo” por estar acompañado por Carlota, Marta y Patricia, sus tres pilares. “Como jugador se disfruta más, pero como entrenador se sufre mucho más de lo que se disfruta. Ellas sufren conmigo, han llorado mucho. Han habido momentos duros”.

En lo deportivo, “no creo que se pueda escribir un final más cruel como el que vivimos”, declaró Calleja en el micrófono amarillo, apuntando que desde dentro eran conscientes de “lo que suponía para el club volver a Primera”, algo que, bajo su punto de vista, en los momentos decisivos quizá jugó una mala pasada: “La temporada pasada te aseguro que hubo un exceso de responsabilidad. Habían jugadores que tenían en la mochila muchas cosas aparte de las deportivas, porque sabían cómo se encontraba el club y conocían a muchos trabajadores. Habían muchas cosas a nivel anímico que pesaban”. Al final, “en una jugada polémica”, el objetivo se fue por la borda con un dichoso penalti que quedará marcado en la historia granota.

Más allá de eso, Calleja considera que “no se puede medir una temporada porque en el último minuto te piten o no un penalti. Creo que hay que ser un poco más responsables a la hora de valorar lo que es el trabajo de muchos partidos y mucho recorrido. Lo cruel e injusto fue que primero por goles, por el golaverage, y después por el dichoso penalti, cuando ya estaba prácticamente acabado el partido, nos quedamos sin el objetivo de ascender. Si hubiésemos despejado estaríamos en Primera División”.

El técnico, consciente del “fracaso” del no ascenso, se tomó unos días de reflexión y duelo para plantear su futuro, pues contaba con un año más de contrato, pero también con una opción para romper el mismo por ambas partes. “Necesitaba unos días, al menos un tiempo, para reflexionar y pensar qué era lo mejor para ambas partes. Después de lo dicho, que para mí fue lo más cruel que he vivido como profesional, no era cuestión de anteponer intereses sino ver qué se podía hacer en el futuro. Tanto la dirección deportiva como yo nos dimos un tiempo para pensar si queríamos continuar. Después de tomarme mi tiempo y mi duelo, hablando con los míos, decidimos que si había un momento para seguir era este. Sabíamos que el club iba a pasar por momentos difíciles y teníamos que remar”.

“El capitán nunca abandona el barco. Lo mejor siempre está por llegar”, fue el mensaje que el técnico transmitió a los medios ante los rumores de su continuidad. “Le dije a Felipe (Miñambres) que yo era el primero que quería continuar, pese a saber las dificultades que iba a atravesar el club. Había que hilar fino para hacer un equipo competitivo, generar ilusión y luchar por estar ahí otra vez e intentar aspirar a lo máximo”.

En ese sentido, Calleja puso en valor el trabajo de Felipe Miñambres para elaborar una plantilla con un jugadores “que viniesen con hambre y un perfil de juego adecuado a nuestra idea”. “Él ya desde la temporada pasada manejaba varios escenarios, uno de ellos era no subir. Creo que ha estado muy rápido y muy acertado a la hora de confeccionar la plantilla y de estar pendiente de cuáles iban a ser nuestras limitaciones”.

También valoró la llegada de José Danvila, del que destacó que viene “con ganas de hacer las cosas bien” y poniendo en juego “su patrimonio, ni más ni menos”. “Trato de acercarme a la persona y con Pepe (Danvila) estoy teniendo mucha cercanía. Confío que entre todos el Levante vuelva a Primera División para salir de donde está en este momento”.

Pero, más allá de mostrarse satisfecho con la elaboración de la plantilla y la energía que desprenden los suyos, Calleja quiere evitar tropezar con la misma piedra que el pasado curso: “No voy a decir que el objetivo es ascender, no lo voy a decir. Fue una experiencia muy mala. Yo creo que nos pesó mucho. Había mucha prisa. Queríamos en la primera vuelta haber ascendido y eso fue un lastre que fuimos arrastrando mucho tiempo. Eso hizo que entrasen nervios, que no nos centrásemos en lo que nos teníamos que jugar. Este año no podemos caer en los mismos errores. Tenemos un equipo totalmente diferente, que a mí me ilusiona muchísimo, me transmite, y hemos conseguido que ellos mismos se crean que el objetivo real sea tratar de ganar al Eldense”.