Bob Voulgaris: “Abrir la mente hacia los datos es parte de nuestra cultura y no cambiará”

En el ámbito del deporte, pocos nombres resuenan con la fuerza de Bob Voulgaris. Conocido por su papel en la revolución analítica de la NBA, Voulgaris ha llevado su mente aguda al fútbol europeo, convirtiéndose en un pionero en la gestión del Castellón. Su experiencia anterior como director de investigación cuantitativa en los Dallas Mavericks le ha brindado las herramientas necesarias para aplicar un enfoque basado en datos que ya está dando frutos.

Voulgaris, que se embarcó en su aventura futbolística buscando ineficiencias en el mercado, ha cambiado radicalmente la dirección del Castellón. Desde su llegada, el club ha ascendido a la Segunda División, donde ha implementado un estilo de juego atractivo y ofensivo. Hasta el momento, los resultados son palpables: el Castellón se sitúa entre los tres primeros en varias métricas de ataque, destacando su compromiso con el fútbol ofensivo.

La visión de Voulgaris es clara: “Con la proliferación de datos en el deporte, se hace fácil desconectar. Demasiadas métricas y poco tiempo para entender su significado es un problema común”. “El objetivo no es ser el club más impulsado por datos del mundo, sino tomar mejores decisiones que los demás clubes y seguir mejorando el proceso”, explica.

Un aspecto interesante de su filosofía es la experiencia adquirida en los Mavericks, donde aprendió que una cultura de toma de decisiones desorganizada puede llevar a errores significativos. “Lo que me gustó fue que si documentabas tu razonamiento, podías convencer a la dirección. Sin embargo, perder tiempo en debates innecesarios entorpecía el progreso”, recuerda Voulgaris. Esta lección ha influido directamente en su gestión en el Castellón, donde se han establecido derechos claros en la toma de decisiones.

A pesar de su enfoque analítico, Voulgaris es consciente de que en el fútbol “los resultados lo dominan todo”. Se refiere a la naturaleza volátil del juego, donde un solo gol puede cambiar la narrativa de un partido. Tras un comienzo irregular esta temporada, despidió a Johan Plat y promovió a Pablo Hernández desde el Castellón B. Este movimiento ha dado sus frutos rápidamente: el equipo ha mejorado su xG (goles esperados) por partido, pasando de 1.52 a 1.69, y ahora tienen la tercera mejor cifra en esta métrica. Además ahora tienen el cuarto mejor xG en contra (0.78/partido) mientras que con Plat estaban admitiendo el doble en esa métrica (1.60) la tercera peor marca en el Liga. Y par más inri con Hernández el Castellón tiene el mejor xG diferencia por partido (+3.66) y están invictos tras cuatro encuentros (3 victorias y un empate).

“Separar el rendimiento del resultado es complicado”, afirma. “Es fácil dejarse llevar por un marcador y olvidar la tendencia subyacente”. La clave, según Voulgaris, es mantener la disciplina y la convicción en el proceso, todo ello apoyado en un futbol ofensivo que te da mas opciones de ganar y en la revalorización de los jugadores para poder vender y seguir creciendo, en base a los datos pero también a la observación, dando prioridad absoluta al dato. “Identificamos a los jugadores a través de nuestros modelos, y luego analizamos el video para entender su estilo y personalidad en el campo”, afirma. Esto convierte al Castellón en un club sin fronteras, capaz de identificar talento en cualquier rincón del mundo.

Voulgaris concluye: “No obligo a nadie a pensar de una manera específica, pero abrir la mente hacia los datos es parte de nuestra cultura y no cambiará”. Su liderazgo representa el futuro del fútbol, donde la combinación de datos y observación puede redefinir cómo se construyen los equipos en el deporte rey.

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