Aprobados y suspensos del Racing de Ferrol: hasta el rabo, todo es toro

Ander Cantero: Resolvió de forma contundente cuando le tocó intervenir. Cumplió por alto y dio una dosis de tranquilidad al equipo desde atrás.

Julián Delmás: Correcto a pesar de sufrir la superioridad física de los hombres de ataque del Sporting.

Jon García: Un frontón en el que rebotan todos los balones. Muy seguro y una vez más siendo el líder del equipo desde la defensa.

David Castro: Sin fisuras y siendo el complemento perfecto junto a Jon García con una pareja incontestable en defensa.

Moi Delgado: Le tocó bailar con la más fea que fue tratar de aguantar las arremetidas de Hassan. El francés fue superior y no consiguió encontrar la fórmula para pararle.

Josep Señé: Volvió a la titularidad ante las bajas y cumplió con creces. Su presencia abarca mucho campo y consiguió sostener al equipo con jerarquía.

Fran Manzanara: Ejercicio de brega para que el bloque aguantase la exigencia física del partido. Entrega y sacrificio.

Iker Losada: De nuevo por el carril central fue un dolor de muelas para el rival. Por dentro es diferencial y tan solo necesitó algo más de calma en las decisiones de los últimos metros.

Heber: Muy vigilado y sin apenas espacio suficiente para poder enviar sus característicos centros con peligro al área.

Nacho Sánchez: Su mejor partido desde que llegó al Racing. Vertical y con la confianza para pedirla y tratar de hacer daño con centros e incluso finalizando jugada. Dio la asistencia del primer gol.

Álvaro Giménez: Desgaste a la hora de presionar y letal a la hora de rematar dentro del área. Hizo su quinto tanto en LaLiga.

También jugaron:

Sabin Merino: Fue el héroe de la noche no dando un balón por perdido en una presión, que rebotó en su pierna para darle el triunfo al Racing en el añadido.

Nico Serrano: Apenas entró en juego unos minutos antes de tener que retirarse por una lesión en el hombro.

Álex Martín: Saltó el terreno de juego el último cuarto de hora para dar mayor empaque al equipo atrás.

Cubero: Luchador y combativo para mantener la tensión en la retaguardia.