Aprobados y suspensos del Pucela: Un punto de poder

El Real Valladolid sigue progresando, pese a ver su racha de victorias en casa rota por un Leganés que supo sufrir en sus peores momentos y mantenerse en pie ante un rival que fue superior en la primera mitad. Un balón parado otorgó a los pepineros un punto de poder en un escenario donde, jugando como frente a los madrileños en la primera mitad, los blanquivioletas no dejarán escapar muchos más.

Masip: No pudo celebrar el bicentenario en casa con triunfo. Estuvo atento en algún intento aislado de los pepineros y resolvió bien las acciones en las que estos rondaron su portería, salvo en el gol, en el que poco pudo hacer.

Luis Pérez: Trabajador durante todo el partido, no se le vio demasiado en ataque. En la segunda mitad, los movimientos de Djouahra y las subidas de Franquesa le generaron algún problema. Contenido pero, pese a esas acometidas rivales, acertado.

Boyomo: Intenso en las disputas y atento ante los movimientos de Miguel de la Fuente. Aunque tuvo una de sus arrancadas en campo rival, se le vio algo más contenido con balón. Leyó bien lo que requería el partido y no sufrió.

Gustavo Henrique: Tenía una prueba de fuego ante el actual mejor delantero de la categoría, que le buscó las cosquillas alguna vez, aunque rindió bien. Habilitó a Sylla en un envío a la espalda de la zaga ante el que estuvo atento Diego Conde.

Escudero: Intentó sorprender a Diego Conde con un disparo tempranero desde fuera del área, primero de los varios que intentó. Rompió líneas con el pase que acabó convertido en el 1-0. Pezzolano ha encontrado en él su guiño a la pizarra.

Iván Sánchez: Dejó sentado a Franquesa en un desborde de calidad en los primeros minutos. No siempre logró hacer eso, pero, igualmente, se le vio protagonista y acertado con balón. Cambió de banda cuando se marchó Raúl Moro.

Juric: Su primera parte fue, otra vez, una exhibición. Sacó un “oh” a la grada en un caño en campo rival. Ganó ocho de los nueve duelos en los que intervino, sumó una docena de acciones defensivas de valor, estuvo excelso con balón... Bajó, aunque poco la frecuencia de acierto en el segundo tiempo.

Monchu: Se le vio dominador, aunque puede que algo menos lustroso que otros días; en un partido dado a la contención y extremar las alertas, estuvo sereno, aunque participara bastante. Asistió de exterior y de espaldas a Sylla.

Raúl Moro: No conectó en demasía en la primera mitad, pero cuando lo hizo en la segunda generó muchos problemas a un Miramón al que trató de cerrar antes. Acabó completando cuatro centros de seis, aunque no dio mucha sensación de productividad.

Kenedy: Intenso como acostumbra, intentó romper la última línea con su potencia. Hizo un jugadón al borde de descanso, tras un gran recorte, que pudo convertirse en el 2-0. Se desfogó y acabó dando muestras de fatiga.

Sylla: Vivió la jugada del 1-0 al límite del fuera de juego; estaba adelantado en el pase de Escudero, pero no así en el toque de Monchu. Galopó al espacio y definió bien para adelantar al Pucela.

También jugaron en el conjunto de Paulo Pezzolano:

Meseguer: El técnico apostó por él para compactarse en un momento en el que el Leganés amenazó con deshilachar a los blanquivioletas. Intentó aparecer en campo rival.

Joni Montiel: Tuvo pocos minutos para demostrar su calidad y se le vio algo acelerado.

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