REAL VALLADOLID 3 - REAL OVIEDO 0

Aprobados y suspensos del Pucela: Amath en tiempos revueltos

El canterano marcó distancias con el Real Oviedo con un doblete que al Real Valladolid le valió más que a parte de su afición.

PHOTOGENIC/PABLO REQUEJODiarioAS

El Real Valladolid supo neutralizar las artes del Real Oviedo, uno de los equipos con una apuesta futbolística más atractiva, hasta minimizarlo al extremo e imponérsele con claridad. El tres a cero no dejó conformes a todos, en vistas de los gritos que volvió a escuchar su entrenador, aunque la mejora respecto a las jornadas anteriores resulta evidente, liderada, en lo goleador, por un Amath que ha decidido elevar su figura aun en tiempos revueltos.

Masip: Se sacó de encima el esférico en una falta lateral botada por Colombatto. Se adelantó a Alemão para despejar de cabeza en un balón largo. Una salida en falso al borde del descanso acabó en un tiro al palo del brasileño. Fue la mayor acción de peligro rival.

Luis Pérez: Puso un centro delicioso para el remate a la red de Monchu. Exigido por Abel Bretones, con quien tuvo una pugna interesante, se le impuso en prácticamente todas las acciones. Se encuentra en un buen momento de forma, que puede verse cortado si se confirma su lesión.

Tárrega: Leyó bien las apariciones de Sebas Moyano por su zona. Su imponente físico le sirvió para ser contundente, ganar unas cuantas acciones e incluso pare presentarse en ataque en jugadas a balón parado. No parece que lleve tan pocos partidos como profesional.

Boyomo: Atento a la hora de anticipar, como en un centro lateral peligrosísimo de Abel Bretones, solo se pasó de frenada en una jugada que no pasó a mayores. Con el cuero estuvo prácticamente impoluto, errando en muy pocas acciones. Se está convirtiendo en uno de los jugadores más regulares del plantel.

Lucas Rosa: No dudó en incorporarse al ataque para completar las acciones ofensivas, como en una jugada en la que se plantó en la frontal. Aunque otra vez se le notó la lateralidad, lo cierto es que lleva dos partidos rindiendo a un buen nivel contra jugadores de calidad.

Juric: El bastión en el centro del campo y uno de los grandes artífices de la anulación del juego carbayón. Completó siete recuperaciones en una primera parte muy abierta. El octavo se convirtió en el tres a cero. Ganó la batalla a Colombatto y confirmó que ‘La tanqueta croata’ ha vuelto por sus fueros.

Monchu: Próximo a la base desde el principio, favoreció una mejor circulación en las primeras fases del juego. Apareció en el área para ejecutar a Leo Román aprovechando el error de Jimmy. Dominante y esforzado en la presión, salió ganador de unos cuantos duelos y entradas.

Amath: Pareció un tanto desconectado en algún momento, ya que a veces se quedaba descolgado a fin de buscar recibir en ventaja. En una de estas, en una transición, marcó el segundo tanto blanquivioleta, y, vivo, apareció en la frontal para hacer el tercero con un gran disparo.

Meseguer: Infatigable en las ayudas, incluso a Luis Pérez en el lateral. Ese despliegue le permitió asomar en último tercio y aparecer puntualmente en jugadas como la del segundo gol. Provocó las dudas en la salida del Oviedo que acabaron con el tercero. A veces está de que no, pero esta vez fue un sí.

Biuk: Trabajador, aunque desacertado en un primer periodo en el que ni completó regates ni ganó duelos. Se resarció con el desborde y el centro para el gol de Amath. Con el poco balón que se le ha visto asumir hasta ahora, ya ha sido capaz de generar una gran sensación de peligro.

Sylla: Pese a la presión de Luengo, consiguió sacar un disparo abajo al borde del descanso. Su inicio de presión es el comienzo del todo en el tres a cero. Pareció obcecado en alguna jugada y aumentó su sequía, pero por trabajo, desde luego, no será.

También jugaron en el conjunto de Paulo Pezzolano:

Anuar: Dio profundidad por banda derecha, como un martillo pilón. La gente alabó su doble recorte dentro del área. El partido ya no dio mucho más de sí, pero se afanó en dejarse ver.

De la Hoz: Lo hizo prácticamente todo bien, hasta una jugada en zona de ataque por la que se ganó un aplauso.

Kenedy: Soltó un latigazo que se le marchó ligeramente alto. Voluntarioso, aunque sin posibilidad de poner un acicate.

Escudero: Con un centro de derechas, estuvo a punto de propiciar el cuarto gol.

Marcos André: Escasa participación que le sirve, no obstante, para ir sumando minutos.

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