A falta del fugitivo Braithwaite y de Puado, el ‘pichichi’ se llama Rubén

A falta de un ‘nueve’ goleador, con Puado bajo lesión, el fugitivo Braithwaite en el banquillo y Dimata gafado a pesar de su ímpetu, bueno es Rubén Sánchez. Autor del gol del triunfo el miércoles ante Las Palmas, incluso el único capaz de marcar en el primer partidillo entre los propios jugadores del conjunto perico dos semanas atrás, el lateral reconvertido ahora en extremo desencalló este sábado el tercer encuentro preparatorio del Espanyol 2023-24, ante el propositivo Al Wakrah qatarí de Bartolomé Márquez, el gran mentor de Luis García.

Que iban a estar las miradas puestas en Dimata, como ‘nueve’ de guardia de este Espanyol, era un hecho. Cierto es que también se repartieron entre Melamed, que regresaba tras superar las molestias en un tobillo el día en que Darder partía desde el banquillo, o en los múltiples canteranos que jugaron de inicio (Fortuño en la portería, Joan Puig una vez más como recambio de Brian Oliván, Gori…). Pero el belga acaparó el foco.

Suya fue la acción que pudo determinar el destino del partido, poco antes de la media hora, cuando fue víctima de un penalti que cometió con inocencia Nabil Irfan, y que él mismo quiso ejecutar. Tal como le había sucedido a Edu Expósito en el anterior amistoso, ante Las Palmas, falló Dimata, que mostró demasiado sus intenciones a Alsayed. No tiene suerte el atacante, a quien en el primero de los partidos de la pretemporada, contra el Cádiz, le anularon un gol completamente legal.

También había protagonizado Dimata la primera ocasión clarísima ante Al Wakrah, cuando no alcanzó a conectar en el segundo palo un centro endiablado de Melamed. Y había iniciado, con una recuperación muy atrás, la veloz transición en la que Lazo, solo ante el portero en esa nueva posición interior que le hace mucho más indetectable, no llegó por milímetros a la asistencia medida, de nuevo, por Melamed.

Estaba teniendo el Espanyol las mejores del encuentro, como el cabezazo picado de Keidi Bare a centro de Rubén Sánchez, cuando el conjunto de Tintín Márquez, muy combinativo e intenso, exhibió el poderío de una de sus mejores piezas, Assal, separado del gol únicamente por el paradón de Fortuño.

Así que le tocaba al Espanyol apretar el acelerador, y respondió. Apareció Rubén por la frontal del área para trazar una pared con Melamed y resolver de primeras, sin control previo, en una volea imparable para Alsayed que se convirtió en el 1-0. La antesala de otra acción, una falta colgada por el omnipresente Melamed, que desvió un defensor con la mano, seguramente en posición natural.

Tal como le había sucedido el miércoles ante el Cádiz, cuando se avanzó en el marcador pero acabó perdiendo por 3-1, se fue desinflando el Al Wakrah mientras ganaba enteros la autosuficiencia de un Espanyol que tuvo el segundo tanto en un centro de Gori cabeceado sin la convicción necesaria por Dimata. Todo ello, antes de que a la hora de partido comenzara el carrusel de cambios que ya en la mediaparte había iniciado Nabil, y de que entre Calero y Sergi Gómez a punto estuvieran de conceder el 1-1 para el Al Wakrah, que acto seguido reclamó un penalti sobre Muneer.

Eran los minutos en los que todo pudo ocurrir, pues a ese breve pero intenso acoso qatarí le sucedieron, en las dos jugadas siguientes, un espectacular tiro de Dimata de rosca que se estrelló en la madera y un remate de Nabil atajado por el meta. Y de portería a portería, a diez minutos para el final volvió a aparecer Fortuño con una espectacular estirada a chut de Gelson Dala, en una acción en la que Óscar Gil recibió un duro golpe en el tobillo derecho.

Se despide el Espanyol de Marbella con un avance en la preparación, con orden, control y mucha movilidad, con incógnitas ya conocidas como la de Darder y otras sobrevenidas como Braithwaite, con la aportación generosa de los canteranos y con otros jugadores inéditos, como Gragera por lesión o Miguelón. Y con dos victorias, ante Las Palmas (2-1) y Al Wakrah (1-0), además de la derrota por la mínima contra el Cádiz (0-1). Lo siguiente será el Utrecht, el próximo sábado. Y, en dos semanas, el debut en Segunda frente al Albacete.