Yeremy Pino: “Cuando escuché a Carvajal sabía que había pasado algo”

Yeremy Pino (21 años) fue testigo de excepción de la imagen de la jornada en LaLiga: la grave lesión de Carvajal. El internacional del Villarreal fue el jugador al que el lateral del Madrid fue a disputarle el balón cuando soltó la fatídica patada que resultó en una triple rotura: del ligamento cruzado anterior, del ligamento colateral externo y del tendón poplíteo en su pierna derecha. Yeremy, que también vivió en primera persona la reciente grave lesión de Ter Stegen, habló de la acción en una entrevista para El Desmarque.

“Es una jugada complicada. Yo intento tocar el balón lo mínimo posible para sacarlo fuera. Creo que ni lo toco. Pero al final él lanza la pierna, me da… Es fortuito, pero es una pena por el momento en el que estaba él, lo importante que es para nosotros [en la Selección] y para el Madrid. Creo que es un ejemplo para el fútbol español y se te hace difícil ver cómo sufrió en el campo porque yo también lo he vivido y es complicado”, dijo Yeremy.

El grancanario explica así la jugada: “Yo me caí, porque él me dio una patada y me dolió, pero cuando yo lo escuché dije: ‘Ahí ha pasado algo’. Y encima en la rodilla… Tú lo sabes cuando tienes algo en la rodilla, ese ‘clac’ lo sientes. Y ya cuando lo dijo la cabeza mía empezó con los fantasmas otra vez. De los dos últimos partidos que he jugado en los dos me ha pasado esto. Intentas evadirte un poco, no pensarlo, pero es complicado”.

Yeremy Pino sabe lo que es sufrir una grave lesión en la rodilla, la que padeció la temporada pasada, que le tuvo siete meses de baja y le impidió jugar la Eurocopa: “La gente dice que es la peor lesión”, apunta el internacional. “Yo lo pasé muy mal. Tuve dos operaciones, una infección… Estás en un proceso que se puede complicar y tienes que estar pendiente de todo, la rodilla se queja… Es como un bebé, tienes que cuidarla todo el rato. Son muchos meses también y no sabes cómo vas a volver, se te pasan muchas cosas por la cabeza. Ves que los compañeros van volando y tú, que no puedes ni caminar, piensas: ‘¡Madre mía! Imposible volver a ese nivel’. Al final el tiempo y el trabajo dan su recompensa”.

El extremo del Villarreal, que ya acudió a la convocatoria de Luis de la Fuente en septiembre y jugó ante Suiza, afirma que “con 21 años, mi forma de vida cambió. Te cuidas mucho más, intentas tomarte las cosas más en serio. Mentalmente te da un plus, en todo: en valorar muchas coas en la vida, porque un día estás y otro no estás. A cualquiera que le pueda pasar lo tiene que mirar por el lado positivo porque le va a dar mucha más fuerza”.

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