Víctor: “Cada día me gusta menos el fútbol actual”

Víctor Fernández (Mérida, 17 de abril de 1974) está en un año de cambio en su vida, tras abandonar el fútbol hace poco más de una década, en agosto dio otro paso más abandonando su amada Valladolid para recalar en Valencia por una cuestión familiar muy concreta. Su hijo Víctor dejaba el Real Valladolid para firmar por el Levante, con 16 años, y gran parte de la familia decidió acompañar al ahora futbolista en su nuevo destino, donde estará cerca de otro de los de lugares de su vida: Villarreal. El sábado blanquivioletas y amarillos se enfrentan y el madrileño nos habla de su vida y de este partido.

¿Qué tal están? ¿Cómo ha sido el cambio de ciudad, de vida?

Estamos muy bien, muy a gusto. Tanto a mi mujer como a mí nos gusta el buen tiempo y estamos disfrutando un poco de la vida después del fútbol. Me desvinculé también del Real Valladolid y me tomo este año como la posibilidad de disfrutar de la familia, del buen tiempo, de Valencia y del niño. También ha venido mi hija mediana y aquí estamos. Es verdad que hemos cambiado varias veces de residencia así que no ha sido nada malo. Es un paso más en la vida. No teníamos claro dónde queríamos vivir después del fútbol. En su momento apostamos por Valladolid porque nos parecía que para su educación era lo mejor y, al final, hemos venido para acá... pero tampoco creo que nos quedemos aquí... disfrutaremos de Valencia y después ya veremos.

Y Víctor Junior... bien, que también era lo que pretendían... Ya ha debutado en Segunda...

Sí, progresando. Ha venido aquí a aprender, a mejorar, a ser más fuerte. A seguir mejorando en el Levante. Quizás el cambio de ciudad haya sido más difícil para él, fue una decisión complicada. La tuvo que tomar él, yo, el representante. Creíamos que era lo mejor para él, pero fue difícil porque era nuestra casa, nuestro club, nuestro equipo. Fue una decisión muy difícil, no todo el mundo sabe lo que pasó, pero seguimos siendo blanquivioletas de corazón.

Víctor padre le da consejos a Víctor hijo o le deja más a su aire y que construya su futuro él mismo...

El paso que dimos también tenía que ver un poco con eso. Yo quería que él volase solo, lo que pasa que en Valladolid, al final, trabajando en el mismo club... era complicado. Para él tampoco era fácil, que yo estuviera allí era una mochila para él. Así que la decisión personal es dar un paso al lado, que disfrute él. Claro que hablo con él, todo lo que está viviendo yo también lo viví, pero todo depende de él. Tiene personalidad, sabe lo que quiere y que tiene que trabajar mucho para conseguir lo que quiere. Pero los consejos se los da el representante que es el que está más cerca de él.

Usted tuvo una carrera muy exitosa empezando por la cantera del Real Madrid, nueve años en Valladolid, en dos etapas, cinco temporadas en el Villarreal... ¿Su carrera fue como soñaba?

El otro día escuchaba a Iniesta y me identifico mucho con lo que dijo... eso de que él de pequeño tenía el sueño de ser futbolista y lo había conseguido. Yo nací futbolista, mi padre me lo inculcó desde pequeñito y lo conseguí. Yo he metido muchos goles, he estado en muchos equipos, la gente me ha querido mucho, me siento muy privilegiado... Luché por ser futbolista, trabajé por ello, me sacrifiqué por ello y lo conseguí. Y me siento muy orgulloso de haberlo hecho. Si echo la mirada atrás si que me doy cuenta de las cosas que he conseguido, pero para mí lo importante fue debutar en Primera, el 4 de septiembre de 1994, con el Tenerife, y estar tantos años en el máximo nivel.

¿El Real Valladolid y el Villarreal son los dos clubes de su vida?

El Real Valladolid es el club que más me ha dado, al final me dio la oportunidad de tener continuidad en Primera, donde más partidos he jugado, donde más goles he metido, donde más años he estado. Estuve en dos etapas muy distintas, donde después de futbolista he estado 10 años más trabajando en el club. Valladolid es la ciudad que más me ha dado y el club que más me ha dado. Jugamos la UEFA, tuve la suerte de no descender nunca. A Villarreal llegué en una etapa en la que el Real Valladolid necesitaba vender, necesitaba dinero... me vendieron ellos porque lo necesitaban. Y aquí estuve cuatro años maravillosos, di un paso más en un club que se quería hacer grande poco a poco y se estaban poniendo las piedras para construir lo que es ahora... Mi fichaje, con el de Guillermo Amor, fueron los primeros grandes fichajes de este club, lo consolidamos en Primera División y me dio la confianza brutal, me hizo sentirme muy a gusto. Son dos clubes a los que les tengo muchísimo cariño. Pero también en otros clubes donde he estado estuve fenomenal: Cartagena, Tenerife...

Y ganó una Intertoto...

Sí, la verdad es que estuve en equipo que no peleaban por títulos, pero mi mayor orgullo es que no he descendido nunca.

¿Cómo ve a ambos clubes?

Creo que el Valladolid se va a enfrentar al Villarreal en su mejor momento de la temporada, seguro que el resultado del otro día les ha dado mucha motivación a los jugadores, a la afición, al club porque seguro que a nivel de confianza y compromiso van a estar mucho mejor, juegan en casa. Es un partido importante para intentar salir de la zona de abajo, pero es verdad que viene de una etapa difícil porque hay tensión en el club, mucha diferencia de opiniones. Lo vi estos años pasados desde dentro y ahora lo veo desde fuera. Es difícil. El Villarreal, por su parte, le veo peleando por otras cosas. Es un club que se ha hecho muy grande, creo que es muy difícil mantener ese nivel alto, pelear contra el Barça, contra el Real Madrid, Atlético... tiene mérito haber competido con estos clubes. Ha pasado por años complicados, pero ahora le veo fuerte otra vez con una buena plantilla, buenos jugadores. Y el mérito es de Fernando Roig. Es difícil de explicar lo que ha hecho este hombre. Los que hemos estado ahí sabemos de lo que es capaz, cada año con buenas plantillas, buenos jugadores y, sobre todo, siendo un club que cae muy bien.

¿Alguna vez ha pensado que le hubiese gustado jugar ahora y no hace 20-30 años?

No lo he pensado mucho, aunque sí es verdad que por mi tipo de juego habría destacado mucho más. También es verdad que por nivel de equipos donde jugué no tenía demasiadas ocasiones, me costaba más hacer goles, pero no lo pienso porque donde he estado han sido experiencias muy bonitas, vestuarios muy bonitos, donde he hecho grandes amigos. Estoy muy orgulloso de lo que he hecho.

El VAR venía a quitar polémica y ahora parece que hay más...

Creo que ahora hay mucha más polémica, es más difícil saber cuándo es mano o no. Una jugada que es penalti una jornada, a la siguiente ya no lo es... Eso genera muchas dudas y, al final, se empeora el fútbol. El VAR se supone que tenía que mejorar el fútbol, pero de momento crea más dudas de las que había. Esperemos que mejore. Encima, cada vez hay menos espectáculo, cada vez es más un fútbol defensivo, los equipos van a no perder en vez de ganar... la verdad es que a mí cada día me gusta menos el fútbol. A mí que me ha encantado, cada vez me cuesta más ir a ver un partido de fútbol.

Hablando de penaltis... usted era un especialistas, de los primeros que hubo en España, desde los 11 metros...

Yo tuve un gran maestro que era Alen Peternac. Coincidí con él en mi primera etapa con el Real Valladolid, era un espectáculo verle, era bestial... poquito a poco fui cogiendo ese estilo y se me daba bien...

Es que usted tuvo unos compañeros brutales en ataque...

Sí, Peternac, Joseba Llorente, también coincidí con Aduriz en Valladolid, tuve a Palermo y Moises en Villarreal... la verdad es que tuve mucha suerte con los delanteros que me tocaron en los equipos. Ellos me hicieron mejor y seguro que yo les ayudé a ellos. Ahora parece que no salen jugadores de esos como yo, del último pase, es una pena porque eso daba mucho espectáculo. Ahora se buscan jugadores más físicos. Es una pena.

¿Qué espera del partido del sábado?

Como ya comenté, al Real Valladolid le pilla en un buen momento después de una victoria que casi nadie esperaba, en un campo complicadísimo, donde casi nadie gana. Ese resultado les viene muy bien y con la afición empujando pueden ayudarles, mientras que el Villarreal es un equipo muy difícil, con jugadores muy importantes. Tiene una plantilla amplia. Va a ser un partido difícil para los dos. Al jugar el Valladolid en casa se lo puede llevar, porque en Zorrilla está bien y llega con confianza.

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