Una segunda golondrina asoma el pico

A pesar de los pesares, aquellos que incluyeron tres goles en la primera mitad en la visita de las Palmas a Getafe, los amarillos fueron capaces de equilibrar un marcador en el Coliseum que traía resonancias muy cercanas en el tiempo y en el espacio. Porque fue en la misma provincia, Madrid, donde hace quince días los amarillos salían derrotados del Metropolitano tras encajar un estruendoso cinco a cero.

Ese punto conseguido tras estar tan abajo en el marcador fue aplaudido con matices por García Pimienta : “Nos va a dar mucha moral”. Porque que los amarillos tras acercarse en el marcador y colocarse a un solo gol tras haber encajado en un pestañeo dos tantos, recibieron otro justo antes del pitido para marcharse a los vestuarios en el descanso y volvieron a verse a un océano de distancia.

Sin embargo, la resaca que deja también el partido en Getafe fue una llamada de atención a la creciente inseguridad defensiva, algo que verbalizó sin tapujos el técnico amarillo en la rueda de prensa tras el encuentro del pasado fin de semana. “Estábamos haciendo muchas cosas bien pero éramos muy frágiles defensivamente”, comentaba el técnico.

Bien es cierto que una golondrina no hace verano. Y también, que el Atlético puede triturarte en el Metropolitano a poco que se den circunstancias de finura por un lado y poca inspiración del otro. No obstante, a la primera golondrina le ha seguido una segunda, a aquellos cinco goles le sucedieron en la siguiente salida otros tres. Y esto pone en guardia a Las Palmas.

Algo que advertía el entrenador amarillo en la misma sala de prensa del Coliseum: “Hemos encajado nueve goles entre en tres partidos”, Atlético —cinco—, Osasuna —uno— y Getafe —tres—. Algo que en contexto sobresale por la anomalía que supone en el resto de la campaña de Las Palmas. Un equipo que antes de visitar el Metropolitano lucía orgullosa su medalla de 20 goles encajados en 23 partidos y que en los tres siguientes recibió casi la mitad que en toda la liga hasta ese momento.

Así que el técnico no dudó en iniciar la autocrítica. “Tenemos que corregir las cosas malas porque realmente hoy nos hemos equivocado defensivamente”, insistiendo el técnico en una palabra “facilidad”. Porque esa fue la sensación de los goles encajados por Valles. Que fueron a quemarropa. “Que los rivales nos marquen goles entra dentro de las posibilidades. Miras el equipazo que tiene el Getafe y esto puede pasar. Pero lo que no puede ser es que nos metan este tipo de goles con tanta facilidad”, reflexionó el entrenador insular.

Así pues, aunque el punto conseguido suponga un soporte, García Pimienta tiene claro su análisis DAFO, ese que habla que las fortalezas de su equipo descansan en la seguridad. “Defendíamos muy bien, todos juntos y costaba muchísimo hacernos goles”. En consecuencia tiene claro por donde pasará el trabajo los próximos días. “Tenemos que corregirlo para los últimos partidos que quedan”.