Una pretemporada para Fekir
El francés disputó 18 minutos desde que volvió y tiene por delante ocho partidos para cerrar el 2023 recuperando sus galones. Pellegrini y el jugador, aliados en una vuelta progresiva.
“Despacio”. Era el aviso de Nabil Fekir tras sus primeros minutos después de su grave lesión mientras cerraba su último entrenamiento previo al derbi ante el Sevilla. Había disputado entonces 18 minutos entre un duelo de Liga y uno de Europa League. Mirada segura y convencimiento de volver a ser el que fue. Pero bajo un clima de cautela máximo. Al día siguiente, se quedó sin minutos en el choque de máxima rivalidad. El francés quiere recuperar su mejor nivel físico y Manuel Pellegrini le traza un plan casi en forma de pretemporada. Tendrá minutos en casi todos los próximos duelos, pero será un camino calmado hacia la caza del mejor Fekir. Ocho duelos que cierran el 2023 y que se convierten en un desafío para el jugador verdiblanco.
Sus minutos tras su recuperación fueron positivos. No hubo lamentos físicos y sí una sensación de que queda aún mucho por recorrer. Lo admite de alguna manera el jugador cuando incide a este diario en que todo va bien y también en que hace falta tiempo y trabajar con calma. Nadie mejor que Pellegrini para sostener sus ya comedidas ansias de juego. El técnico comprende que su ritmo de juego no puede asemejarse al de muchos de sus compañeros, por mucho que su talento sí entierre algunas carencias lógicas tras varios meses sin partidos oficiales.
Los médicos recomendaron que jugara minutos contados en su primer choque de Liga y algo más en el de Europa. Y así lo cumplió Pellegrini. No le dio tiempo de juego en el derbi, quizás porque las exigencias eran máximas y la tensión del final del duelo no demandaban su presencia sobre el césped. Él había diseñado su plan de vuelta con miras a este encuentro, pero su fútbol aún necesita algo más de tiempo. La vuelta del parón le muestra un calendario repleto de pruebas. La Copa del Rey y la Europa League invitan a que Fekir tenga tiempo de juego y que así pueda alcanzar esa versión que lo convirtió en una pieza esencial en el plan de Pellegrini.
Lo que llegue después será un dilema mayor para Manuel Pellegrini. El técnico tiene a Isco convertido en su particular líder en tres cuartos, con libertad de movimientos. Justamente el mismo rol que cumplía Fekir antes de su lesión. “Los buenos siempre pueden jugar juntos”, dictaminó hace poco Pellegrini al ser cuestionado por ese misterio. Ya lo resolverá reinventando a este Betis como lo hizo antes en tantas ocasiones. De momento, toca pausarlo todo. Fekir quiere ser de nuevo Fekir.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.