Un mercado al ralentí

Este mercado invernal va a ser tranquilo en Girona. En primer lugar porque el equipo transita con calma por la Liga, en segundo porque tiene una plantilla bastante bien compensada y en tercero porque tiene las 25 fichas del primer equipo cubiertas. Una realidad que, sin embargo, no va a impedir que, como casi todos los equipos, el Girona se mueva también en esta ventana de fichajes. La operación más avanzada, y que debería ser oficial en las próximas horas, es la cesión de Ureña al Cartagena.

La marcha del extremo no es ningún secreto y ha sido ya confirmada por el club murciano. No está todo cerrado, faltan como siempre algunos flecos, pero es una operación que beneficia por igual a las tres partes. Al Cartagena porque se refuerza con un jugador explosivo, de banda y muy vertical, al Girona porque da salida a un jugador con pocas oportunidades en el primer equipo y mucho nivel para el filial y al propio Ureña porque seguirá con su crecimiento como futbolista en un club profesional. Su salida, sin embargo, no desbloquea ninguna posible llegada pues Ureña tiene ficha del filial.

En el capítulo de cesiones hay otro nombre encima de la mesa: Ibra Kébé. Lesionado durante buena parte de la temporada, está por ver qué decisión acaba tomando el club respecto a su futuro. Entra en los planes cederle por la misma razón que Ureña, que tenga más minutos, pero no es ni mucho menos descartable que acabe quedándose en Montilivi. Quien seguro lo hará es Ramón Terrats, que también superó una lesión, pues este sí tiene más minutos en el primer equipo. Fue el relevo de Oriol Romeu en el partido ante el Espanyol y puede adaptarse también a la posición de central, la peor cubierta de la plantilla.

Para que haya una llegada, algo que no se descarta, tiene que haber salidas. Y en este capítulo se apuntan dos nombres: Manu Vallejo y Borja García. Son dos de los futbolistas que menos cuentan para Míchel o, por lo menos, los que menos vienen jugando en las últimas semanas. En caso de que alguno de ellos saliera se estudiará alguna incorporación. En cuanto a las salidas de hombres importantes, tranquilidad. A cada día que pasa es menos probable que llegue un equipo con el capital necesario para llevarse a Arnau o Aleix Garcia, por lo que todos en Montilivi confían en que sigan. Son vitales.