Un derbi de andar por Europa

Europa al poder. Los dos grandes equipos vascos encaramados a la parte alta de la tabla discutiendo por quién es el jefe. Anoeta programa un derbi apasionante (sigue el partido en directo en AS.com). La Real Sociedad, sexta, recibe al Athletic, cuarto a tan solo dos puntos. Los txuri-urdin se pasean este año por los campos de Primera con la etiqueta Champions y los leones defienden un peldaño precisamente que da derecho a ese torneo, aunque se conforman con acudir a cualquier competición europea después de un lustro de ausencia.

El Athletic encara el derbi con la intención de cortar su peor racha del siglo en Anoeta, donde no gana desde 2017 y solo ha sido capaz de lograr dos empates en sus últimas seis comparecencias. El último triunfo bilbaíno en el este duelo se remonta al 12 de marzo de aquel año, cuando, como ahora con Valverde en el banquillo, ganó por 0-2 con goles, uno en cada tiempo, de Raúl García de penalti y de Iñaki Williams. Desde esa fecha los derbis disputados en la capital guipuzcoana se han saldado con cuatro triunfos locales y dos empates, ambos a uno, en las temporadas 2020-21 (Roberto López y Villalibre) y 2021-22 (Isak de penalti y Muniain, tras cantada de Remiro). De no imponerse esta vez, el Athletic llegaría a los siete pulsos vecinales sin ganar a domicilio e igualaría la peor serie en el estadio donostiarra inaugurado en 1993. Desde su primera visita a Anoeta el 8 de mayo de 1994 el conjunto rojiblanco encadenó cuatro empates y tres derrotas hasta que el 14 de enero de 2001 celebró su primer triunfo gracias a un doblete de Joseba Etxeberria (0-2).

Para los pupilos de Imanol es la oportunidad de firmar la tercera victoria consecutiva en Liga, con el aliciente añadido de que sería ante el equipo con el que hay más rivalidad. Pero los leones venderán cara su piel, pues llegan a Donostia tras un inicio de Liga sensacional, con solo un partido perdido, el inaugural en casa ante el Real Madrid. La tarjeta de visita de los realistas no envidia mucho ese subidón: se traen dos victorias consecutivas ante Getafe y Valencia y con el saco de goles a favor lleno. De hecho, ahí podría estar una de las claves del partido, con un conjunto local que lleva un buen bagaje realizador a favor, frente a una defensa bilbaína que está siendo un verdadero muro.

Imanol cuenta con todos, a excepción de Odriozola que se cayó a última hora por una sobrecarga en el abductor y Zakharyan, que sigue arrastrando las complicaciones ocasionadas por una enfermedad. La maratón que están soportando estos días, con la Champions de nuevo a la vuelta de la esquina, el martes en Salzburgo, recomienda hacer rotaciones. La gestión de minutos ha sido clave para que los teóricos titulares de la Real afronten el derbi en condiciones óptima. Volverá Le Normand y en medio regresa el trío de gala: Merino, Zubimendi y Brais Méndez.

En el Athletic ha cierto desconcierto por circunstancias ajenas al propio juego. La lesión de Galarreta y la sanción a Sancet por su expulsión ante el Getafe desoyendo el Comité de Competición las alegaciones planteadas por el Athletic (segunda roja este año, al nivel de Chimy, al que se le cruzan los cables a menudo), hace que salte por los aires un medio campo ya muy consolidado con Vesga completando el triángulo.

La buena noticia es el regreso de Nico Williams, que podría tener minutos, pero sin forzar mucho la máquina tras superar su lesión muscular. El que no se pierde este derbi por nada del mundo es Iñaki, que está cuajando la mejor temporada de su vida. Pondrá en apuros a Tierney. El Salzburgo, segundo rival de la Real en la fase de grupos de la Champions, defiende hoy el liderato en la Bundesliga austríaca en la visita al Lustenau, el colista. Por el momento, suma seis victorias, un empate y una derrota.