Subasta por Bono

La final de la Europa League en la que volvió a convertirse en el héroe del Sevilla, con dos penaltis parados, ha sido probablemente el último encuentro de Yassine Bono con el equipo nervionense. En Anoeta jugó Dmitrovic. El portero marroquí tiene contrato hasta 2025, pero le acechan ofertas económicas muy importantes con las que seguramente no puede competir el Sevilla. De la Premier y de Italia.

Por Bono, de 32 años, se interesó ya en el pasado mercado invernal el Tottenham, que amenazó con volver a la carga este verano. En los últimos días se ha sumado el interés del Aston Villa de Unai Emery, en el que por cierto juega el argentino Dibu Martínez, competidor con Yassine en la gala del Balón de Oro. Y en Italia ha preguntado por el guardameta el Inter de Milán, que tiene al camerunés Onana pero anda buscando un reemplazo de garantías para el veteranísimo (38 años) Samir Handanovic, que termina contrato este verano.

Desde Arabia Saudí, que no escatima esfuerzos por robarle estrellas a Occidente, también se aireaba ayer una oferta del Al-Ahli, histórico club saudí que acaba de volver a la Primera División tras haber descendido sorprendentemente el año pasado. Una de las estrellas del periodismo deportivo del país de Oriente Medio, Salman Al-Mutaiwee, aseguraba que la oferta económica al guardameta es “muy importante”. Otra cosa es que pueda colmar las expectativas del Sevilla.

En Nervión se frotan las manos con esta subasta por el que la FIFA consideró el tercer mejor portero del Mundo, MVP de la final de la Europa League y en el XI inicial de esta última edición de la segunda competición europea. Con Bono no se aceptarán ofertas por debajo de los 20-25 millones de euros a pesar de la veteranía del futbolista. La clasificación para la Champions gracias al título europeo ha ralentizado las urgencias económicas de la entidad de Nervión.