Sivera y Kike García son los héroes de Coudet

Se vivía en El Sadar un partido de esos en los que las aficiones dan ejemplo de hermanamiento, ambas se llevan muy bien. Se medían Osasuna y Alavés en un encuentro en el que los rojillos querían reencontrarse con la victoria después de tres jornadas sin ganar. Los babazorros llegaban tras la destitución de García Plaza, con Coudet estrenándose en el banquillo en Liga días después del fiasco copero. Necesitaban puntuar a toda costa. Los navarros partían como favoritos, ya que el último choque perdido contra ese rival databa de 2016. Hubo un tiempo para cada uno. El Chacho busca héroes y tiene a dos, con traje, capa y escudo: Sivera, que lo para todo, y Kike, que vive una segunda juventud y lleva dos dobletes en estas pocas horas con Coudet. Este saca brillo a un 4-1-3-2, con Jordán cogiendo galones.

Sin tiempo a que los aficionados se sentaran, a los 40 segundos de comenzar, en la primera jugada, el exrojillo Kike García marcaba para los visitantes, tras nueve toques y un gran pase de Carlos Martín. No lo celebraba por respeto a su antigua afición. Los de Coudet salieron mucho más centrados que los locales. Osasuna se mostraba desubicado. Poco a poco se fueron centrando y Bretones pudo marcar tras un pase de Areso pero el partido no tenía un dominador claro. Los de Coudet cerraban filas para tratar de conservar el resultado a favor. El juego se desarrollaba con demasiadas interrupciones. En el minuto 33, de nuevo Kike García ponía en vilo a los aficionados rojillos, al marcar un golazo por la escuadra pero fue anulado de la manera correcta por fuera de juego. El Alavés estaba más cerca de ampliar distancias que Osasuna del empate. En los minutos finales los locales lo intentaron de todas las maneras, pero la. defensa de los alaveses estaba muy bien plantada. Al Alavés le sirvió el temprano gol de Kike García para marcharse al descanso con ventaja.

Los rojillos salieron con ganas en la segunda mitad. Raúl, que acaba de salir al campo, lo intentaba. Vicente Moreno cambiaba de sistema para jugar con dos punas tirar a Aimar a la izquierda. El Alavés se encontraba cómodo, sabedor de su ventaja. Pero los locales iban a por todas. Catena estuvo a punto de marcar pero lo evitó Sivera con una espectacular parada. En la siguiente jugada, en el minuto 55, Catena cabeceaba un balón para que Budimir anotara el empate. Osasuna se crecía y en el minuto 60, Rubén García anotaba el dos a uno de falta, con mucha fortuna. Pero no estaba todo dicho y en el minuto 67, otra vez Kike García, volvía a empatar el encuentro. Ambos equipos buscaban con ahínco que el partido cayera de su lado, pero éste se había enfriado bastante. Al final Osasuna y Alavés se repartieron los puntos, con el primero abonado a las tablas y un Glorioso al que el punto le sabe a poco.