“Si no hay inversión es difícil plantearnos otra cosa”

“Si no hay inversión, es difícil plantearnos otra cosa”. La frase la pronunció Rubén Baraja anoche, cerca de la una de la madrugada, en la rueda de prensa posterior a la derrota contra el Barça, y contextualizada en una pregunta acerca de los jugadores Otorbi (16 años) y Tejón (19). El técnico tuvo que tirar de ambos futbolistas de la cantera para intentar revitalizar a un equipo que iba perdiendo 1-2, después de haberse adelantado en el marcador.

Así escuchada, dentro de una respuesta que parecía genérica y con el tono conciliador que asume Baraja en sus comparecencias, tampoco pareció muy grave. Pero analizando la situación y echando mano a los números, la sentencia fue una de las más lapidarias de la pretemporada en el Valencia. Con la estadística en la mano, el Valencia sólo ha gastado 150.000 euros en reforzarse, que se utilizaron en conseguir la cesión de Dani Gómez, delantero que llega a préstamo del Levante. los otros dos refuerzos han llegado a coste cero: Dimitrievski, que quedaba libre tras acabar en el Rayo Vallecano; y Rafa Mir, cedido del Sevilla.

Comparando con el resto de equipos de Primera División, la inversión en fichajes del Valencia es la penúltima de la Liga. por detrás, sólo está el Rayo Vallecano que aún no ha invertido ni un euro en fichajes. El Espanyol, con 400.000 euros gastados, y el Mallorca (1,5 millones), según un estudio que publicó Onda Cero, son los clubes que le preceden en esta peculiar clasificación. En Valencia llama la atención que algunos clubes como el Osasuna (Bryan Zaragoza) o el Alavés (Carlos Vicente, en enero) le quiten fichajes al club blanquinegro por unos cientos de miles de euros.

Pero lo peor no es la foto a día 18 de agosto, con casi dos semanas enteras para poder moverse, sino la escasa predisposición a fichar. La declaración oficial es que sólo falta un extremo izquierdo por completar la plantilla para completar el 20+3 (20 jugadores de campo y tres porteros) que quiere Baraja. La opción de Luis Rioja, del Alavés, se paralizó pese a haber llegado a un acuerdo con el futbolista desde hace muchas semanas. La imposibilidad de hacerle una oferta seria al Alavés para sacarlo lo ha dejado en el tintero. Otros equipos, como el Mallorca, ya han llamado a su puerta y podría escaparse también la primera opción para la banda.

Sólo en el caso de que salga traspasado alguno de los futbolistas que forman la plantilla, habrá más movimientos. En unos días se debe resolver el tema de Mamardashvili. Si sale el portero por 40 millones, importe que quiere Lim, habrá más fichajes. Eso sí, nadie en el Valencia sabe qué porcentaje de esos 40 millones será para reforzar la plantilla. El meta costó 850.000 euros por lo que prácticamente todo sería beneficio. Si Lim autoriza a gastarse el 10% de lo que entre (4 millones) en las oficinas de Mestalla ya se darían con un canto en los dientes.

Y por último está el caso Castillejo, otra pata que puede ayudar a que el Valencia invierta algo en fichajes. El futbolista tiene contrato hasta 2025 pero no cuenta para Baraja. Se valora su rescisión pero, dado el nivel económico que maneja el Valencia, pagarle los 2,5 millones brutos que tiene firmados para rescindirle, sería ya un exceso. El club está intentando llegar a un acuerdo para que lo que se libere de su ficha pueda invertirse en algún refuerzo de bajo coste.

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