Savio: “¿Vinicius? Si regatear es provocar, algo no va bien”
Savio Bortolini (49 años) ganó la Séptima y, como Vinicius, vivió el tránsito del Flamengo al Madrid. Da la cara por él en AS: “Lo que le está sucediendo es lamentable”.
Es febrero pero no lo parece en Rabat. Un sol de primavera calienta La Marina, una zona exclusiva de la capital marroquí donde espera Savio Bortolini (Vila Velha, 49 años), una de las zurdas más elegantes y dribladoras del fútbol brasileño en las últimas décadas. Recibe a AS en el Hotel Fairmont luciendo un físico envidiable, su ancha sonrisa y ganas de hablar de fútbol.
¿Decepcionado por no poder vivir este sábado una final Real Madrid-Flamengo?
Sí, mucho. Había mucha expectación en Brasil, entre los aficionados del Flamengo y yo mismo por ese partido. Su semifinal no fue buena. En mi país es el inicio de la temporada, pero cuando se tiene un objetivo tan importante como es un Mundial de Clubes la preparación tiene que ser diferente. Al Madrid también le costó un poco, esto habla de cómo ha crecido el fútbol en otras partes del mundo. Ya nadie gana fácil.
Hábleme de Vinicius.
Me encanta porque coge el balón y encara. Y si no le sale, lo vuelve a intentar. A mí me gustan los jugadores así. Además de su juego, me gusta su mentalidad. ¡Qué golazo al Al Ahly!
“Las características de Vini era un poco las mías, velocidad y regate, y no era provocación ni nada de eso”
Supongo que está al tanto de todo este ambiente tóxico que se he generado en la Liga española contra él.
No lo entiendo, de verdad. Es lamentable lo que está pasando. No veo nada que justifique esto que le está sucediendo. Desde fuera veo un chaval que intenta jugar y que hace uso de su mejor característica en el campo, que es el regate. Y la velocidad. No veo provocación. Si regatear es provocar, algo no está bien, estamos perdiendo el fútbol. Es un chaval que hace disfrutar a la gente. Es triste lo que está pasando. Una lástima. No lo entiendo. Son los contrarios los que le provocan a él. Espero que todo se tranquilice y veamos sólo fútbol.
Si regatear es provocar, usted entonces fue un provocador nato...
¡Claro! ¿Qué haces con la pelota? ¿Se la das siempre al que tienes al lado? ¡Dios mío! Son características del propio futbolista. Algunos la suya es que son buenos marcadores, excelentes pasadores, goleadores... y también hay regateadores. Yo crecí en Brasil viendo el fútbol nuestro de regates, de improvisaciones, desde Garrincha... Mis características eran un poco las suyas, las de Vini, el regate y la velocidad, y nunca fue una provocación ni nada de eso. Era la manera que veía en el campo para jugar mejor y hecerlo bien, nada más.
Rodrygo dijo en estas páginas que a él lo que le gusta es ser diez. ¿Es donde mejor encaja en este Madrid?
Buena pregunta (ríe). Ese chaval, además de su calidad, tiene una manera en el campo de ver el partido de formas diferentes. Le pones en la banda derecha, bien, en la izquierda, bien, por el centro, bien, un poco más reculado, bien... Es un futbolista que tiene una inteligencia especial para hacer funciones muy diferentes. Este tipo de jugador es muy difícil de encontrar a este nivel.
“Lo que he visto de Endrick me gusta muchísimo, tiene potencial para triunfar en el Madrid”
Endrick tiene una pinta magnífica.
Tiene 16 años pero lo que le he visto en Brasil me ha gustado muchísimo. Es un chaval todavía, tiene que evolucionar mucho y le falta aún ese proceso, pero tiene mucha fuerza y un enorme potencial. No sabemos qué le deparará el futuro, pero es un fichaje que puede triunfar en el Madrid.
El Chelsea se ha gastado en enero casi diez veces lo que toda LaLiga en fichajes. ¿La estrategia del Madrid de fichar jóvenes, especialmente en Brasil, es la única vía de supervivencia contra la Premier?
El fútbol ha cambiado mucho. A mí el Madrid me fichó con 23 años. En el fútbol actual habría salido de Brasil a los 18. El Madrid siempre está ahí, tiene que mantener una tradición, esas 14 Copas de Europa, ahora quizá este octavo Mundial... No puede tener otra política. Si esperas un año por un futbolista te sube el precio de 20 millones a 100.
La moneda ha salido cruz con Reinier, que emergió como usted y Vinicius del Mengao...
No es fácil. Hablamos de niveles muy altos, yo vi muchísimos jugadores vestir la camiseta del Madrid teniendo un gran potencial y no jugaron. Es un club de muchísima presión y el resultado tiene que ser inmediato, siempre. El Bernabéu es exigente. No todos pueden jugar. Reinier jugó muy bien en Flamengo, pero la adaptación a veces no es sencilla.
¿Estamos ante un Madrid aún en transición entre la vieja guardia de las cinco Champions y los Camavinga, Tchouameni, Vini, Rodrygo...?
Sin duda. Es una buena mezcla de experiencia con juventud. Es un proceso de renovación y se atisba poco a poco. Es muy equilibrado y sigue generando resultados. Ahí está la Champions del año pasado y este nivel competitivo tan altísimo que ofrece el Madrid durante tanto tiempo es muy complicado de conseguir.
Lo que logró el Madrid en Europa la temporada pasada va a ser difícil que alguien lo repita.
Lo vi desde Brasil junto a mis hijos, que son hinchas del Flamengo y del Madrid, y Dios mío... Yo viví cosas muy importantes en el Madrid, esa Séptima, pero lo del año pasado... Fue una locura lo que lograron. Es una camiseta, la del Madrid, muy fuerte. Es un equipo que jamás se rinde, tienes que matarlo, porque no se rinde.
¿Le tendremos de vuelta por España para ver in situ cómo queda el nuevo Bernabéu?
¡Eso espero, sí! Tuve el honor de jugar durante cinco años en el Bernabéu y es un orgullo para mí. Con qué cariño me recibían con esas gradas. Es una actualización del templo del fútbol y yo espero estar allí.