Rodrygo se rebela
El brasileño, ensombrecido por el tándem Vinicius-Mbappé y su tridente con Bellingham, ‘inventó' la jugada contra el Betis que dio lugar al primer gol de Kylian en el Bernabéu.
En el fútbol actual el marketing marca muchas veces los tiempos y encauza también los debates. En la búsqueda de un tridente icónico con Vinicius, Mbappé y Bellingham y un eslogan como el de la BBC que emulara en predicamento y goles a aquella delantera que formaron Benzema, Bale y Cristiano, un hombre quedó fuera de la ecuación: Rodrygo, que el pasado domingo brilló ante el Betis y ‘fabricó’ el primer gol de Mbappé. Este Madrid de Ancelotti no es el de un tridente, sino el de cuatro fantásticos arropados por un elenco de secundarios de lujo que, en palabras de uno de ellos mismos, Valverde, están “para correr por los de arriba”.
En una temporada con un ataque lleno de estrellas, Rodrygo parecía el eslabón más débil de esa delantera mágica. Mbappé y Bellingham llegaron con la vitola de Galácticos y Vinicius se la ha ganado a pulso como principal candidato que es al Balón de Oro este mismo año. Condiciones para ser casi intocables. En Las Palmas, con la suplencia del paulista, quedó patente esa idea. Pero Rodrygo, olvidado también en las nominaciones al prestigioso galardón, está dispuesto a demostrar que, pase lo que pase, no se resigna a ese papel a la sombra de sus tres compañeros. Contra el Betis recuperó la titularidad. Los focos, y el premio al MVP del partido, se los llevó Mbappé. Faltaría más, era la primera gran noche del francés. Pero hasta el gol de Kylian (que nació de las botas de Rodrygo), el paulista fue el mejor y más activo de los tres del ataque.
Con siete intentos de regate, de los que completó tres, nadie se atrevió tanto como Rodrygo. Fue, según datos de Opta, el jugador del Madrid que más ocasiones creó (5), el que más duelos afrontó (15) y el que más centros puso al área (6). El equipo empezó a tener las ideas más claras en ataque cuando, mediada la primera parte, el de Osasco comenzó a aparecer más pegado al costado. Desde ahí inició la fabricación del gol de Mbappé, en una conducción desde la lateral del área que le llevó a recorrerse la mitad de la frontal y ceder a Valverde como intermediario en el balón que acabó con la primera diana del francés en LaLiga y en el Bernabéu.
A Rodrygo no le contará como asistencia (sí la sumará Valverde), pero cuatro de los nueve goles que lleva el Madrid esta temporada han contado con su participación: antes marcó en el debut liguero en Mallorca, preparó la falta con la que Valverde abrió la lata ante el Valladolid y también intervino en la construcción de la jugada del gol de Mbappé en la Supercopa. Y cuando el Madrid explote su potencial a balón parado vendrán más, porque esta temporada Rodrygo es el heredero de Kroos como encargado de poner en juego los córneres.
Su aportación al equipo no siempre queda reflejada en los números. A veces también pasa desapercibida en listas como la del Balón de Oro, que lo ha ‘olvidado’ en el primer corte entre los 30 mejores futbolistas del mundo. Una imagen vale más que mil palabras. A Rodrygo le bastaron seis instantáneas y un emoji, las que publicó en una story en Instagram, para mostrar su desacuerdo con esa ausencia. Los tres títulos conquistados con el Madrid, los cinco goles que marcó en Champions en su camino hacia la 15 o sus actuaciones contra City y Bayern no han sido suficientes para obtener la nominación.
El que no se olvida de Rodrygo es Ancelotti, que se esmera una y otra vez en poner en valor su trabajo e integrarle también en ese tridente de ataque que, escoltado por Bellingham, dispone el italiano. “Creo que entre Vinicius y Mbappé tienen una buena relación, también con Rodrygo”, recalcaba tras el partido ante el Betis sobre el penalti que Vini le cedió a Kylian. Y, aunque Rodrygo pueda parecer el eslabón más débil en ese ataque, Carletto no ha dejado de ensalzar la importancia de la labor del paulista cuando toca defender. “Con Rodrygo trabajando ganamos la Champions en 2022″, decía este domingo. Y diez días antes, en vísperas de enfrentarse al Valladolid, incidía en ese rol. “Todos sabemos cuáles son las cualidades que tiene Rodrygo. Cuando tenemos un equipo tan ofensivo, los delanteros tienen que trabajar un poco más y él lo está haciendo muy bien”.
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