Real Madrid y Barcelona, el idilio terminó

En los últimos años y por interés común, han caminado de la mano. Real Madrid y Barcelona son dos entidades que están obligadas a convivir, pero que difícilmente pueden ser socios y compartir objetivos. La rivalidad deportiva y social es tan grande que lo que buscan uno y otro termina chocando de manera inevitable. Hay que reconocer que Joan Laporta y Florentino Pérez han sabido caminar en el alambre durante los últimos cuatro años, pero ahora, el club blanco y la entidad catalana vuelven a estar equidistantes. Sin la tensión vivida en épocas pasadas, como la de Lorenzo Sanz y Joan Gaspart, la amistad ha dejado paso al distanciamiento dentro de la cordialidad, pero cada uno buscando el bien de su equipo y atreviéndose a cuestionar en público lo que hace el otro, es decir, el gran rival.

Los acercamientos del presidente azulgrana de los últimos meses hacia Javier Tebas (partido en Miami) y Aleksander Ceferin, enemigos públicos de Florentino Pérez, ya denotaban que el cambio de tendencia era una evidencia, algo que quedó ratificado en el discurso del mandatario madridista en la asamblea de compromisarios del Real Madrid. El presidente recordó aquello de que el club blanco va a ir hasta el final en su intento de que se juzgue todo lo sucedido y las consecuencias de los pagos del club catalán al segundo del CTA durante 17 años.

El movimiento de los dirigentes de la entidad madridista alrededor del caso Negreira es la principal evidencia de que el interés de cada club camina por sendas divergentes. El Real Madrid se ha personado en los juzgados y también en los despachos de la FIFA, con el informe del que se lleva hablando tiempo y que ya ha enviado a la sede del fútbol mundial respecto al arbitraje español y su influencia en los éxitos del Barcelona de las últimas décadas.

El recorrido y las consecuencias en forma de sanción llegan de la mano de lo que marque la justicia. Desde Valdebebas emiten mensajes de que van a ir hasta el final. “La batalla no ha hecho más que empezar”, declaración que también salpica a la Federación, entidad que busca la manera de regresar a una relación normal con el Real Madrid, algo que no existe ahora mismo. Tal y como ha podido saber este periódico, las denuncias van a ir más allá. No terminan en el caso Negreira. Tiempo al tiempo.

“Todo el mundo sabe lo que pasó, pero el Madrid fue el único que se personó. No es normal que cuatro presidentes del Barcelona hayan mantenido un sistema en el que se paga al vicepresidente de los árbitros”, dijo Florentino Pérez.

En cuanto al asunto Superliga, ni el Barcelona ni ninguno de los equipos que firmaron el compromiso con la empresa A 22 relativos a su adhesión al proyecto Superliga se ha desligado de ello. Dos meses atrás se desató la tormenta que parecía definitiva tras la filtración de las reuniones mantenidas por la Superliga con dirigentes de la UEFA y que ha sido considerada como el golpe definitivo, que llegó tras una filtración de las mismas por medios catalanes. Días después, Laporta escenificó todo con su aparición junto a Ceferin en la asamblea de la antes llamada ECA o asociación de clubes europeos. Ya saben aquello que dijo el presidente respecto a lo sucedido con Negreira: “Es de lo más grave que he visto en el mundo del fútbol”. Caso que parece olvidado, pero que no está cerrado por la UEFA.

A partir de esos movimientos cambió todo y en Valdebebas entendieron que era el momento de poner distancia. El guante lo ha recogido Laporta, que no olvidemos está metido de lleno en precampaña electoral y que por ello todo este ruido con el Real Madrid en la diana, le viene de maravilla. Ahora habla de que el club blanco representa el poder y el Barcelona la libertad, dentro de su interpretación de lo que son ambos clubes. Palcos, uno y otro, con importante presencia empresarial y política.

Por el momento se respetan en lo deportivo. Luchan por el fichaje de jugadores en momentos puntuales, pero se alejan de los que están en poder del otro, al menos por el momento. En los últimos años han existido importantes ofrecimientos de futbolistas de la cantera, especialmente de la del equipo catalán al Real Madrid por aquello del momento económico de los azulgrana, que fueron rechazados. Veremos qué ocurre a partir de ahora.

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